Chocan dos trenes de carga en Guayos provocando gran derrame de petróleo

Hasta el momento no se reportan fallecidos. (Captura de pantalla © Deyniel González – Facebook)

Dos trenes de carga chocaron en la mañana del sábado 7 de diciembre en el Elevado de Guayos, poblado del municipio espirituano de Cabaiguán. Uno de los trenes transportaba petróleo de la refinería Sergio Soto y el hidrocarburo se derramó, aunque los reportes oficiales no dan detalles de la cantidad de vagones comprometidos.

De acuerdo con el diario oficialista Escambray, hasta el lugar se ha trasladado un operativo de fuerzas especializadas para atender la emergencia. Una posterior nota oficial de la Unión de Ferrocarriles de Cuba señala que no se lamentan fallecidos y se investigan las causas.

“Siendo las 07:30 horas del día 7 de diciembre de 2024, en el Km 349.0 de la Línea Central entre las estaciones Guayos y Siguaney, en la provincia Sancti Spíritus, hubo de impactarse el Tren Extra 67, locomotora 52538, con una formación de 26 vagones cargados contra el Extra No.912, locomotora 38266, con una formación de 11 vagones cargados”, refiere el comunicado.

Los daños se concentran en la locomotora 38266, y en una de las cisternas (vagones con combustible), mientras que las líneas ferras no presentan afectaciones. Aunque no se señalan culpables directos, la nota expresa que el choque fue producto del “incumplimiento del reglamento de operaciones de los ferrocarriles”.

El derrame de petróleo llega en un momento crítico para el régimen castrista, que no tiene disponibilidad de hidrocarburos para asegurar la generación eléctrica ni los medios de transporte. Recientemente, trascendió que había baja disponibilidad de combustible de avión.

El sistema ferroviario cubano enfrenta una crisis profunda debido a la falta de inversiones sostenidas, lo que ha resultado en trenes obsoletos y una infraestructura en deterioro. Aunque se han anunciado proyectos de modernización con países como Rusia y China, estos han avanzado lentamente o no se han concretado. Por ejemplo, en 2019 se firmó un contrato con la empresa rusa Sinara para suministrar 75 locomotoras, pero las entregas se han retrasado.

Con más de 8.000 kilómetros de vías, el ferrocarril cubano sufre de mantenimiento insuficiente, lo que limita la velocidad y seguridad de los trenes. Esta situación afecta tanto al transporte de pasajeros como al de carga, impactando negativamente en la economía y la calidad de vida de la población cubana.

Otros accidentes ferroviarios recientes

El pasado 12 de septiembre un tren de carga se descarriló en el kilómetro 151 de la Línea Central, entre las estaciones de Quintana y Jovellanos en Matanzas, afectando 100 metros de vías y obligando al cierre temporal de esta arteria ferroviaria esencial. Este incidente interrumpió servicios clave, dejando varados a pasajeros y mercancías.

En agosto, un tren de pasajeros que recorría la ruta Manzanillo-La Habana sufrió un accidente. Afortunadamente, no hubo víctimas ni heridos, pero el evento subrayó la vulnerabilidad del sistema ferroviario del país, especialmente en zonas afectadas por lluvias intensas​.

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