¿Cómo son los cubanos?

Tratan de estar siempre a la moda, mantener una buena higiene personal y una imagen bien presentable. (Foto: Periódico Cubano)

Para la mayoría de los extranjeros, Cuba se asocia con playas, tabaco, ron, música, bailes, sonrisas, alegría y felicidad.

Muchos vienen a Cuba por su calor caribeño, bellas playas, arena blanca y agua cristalina. Muchos vienen a disfrutar de los mejores mojitos, auténtico tabaco, ambiente festivo e incluso a encontrar amor. Muchos consideran la isla caribeña un paraíso, donde pretenden encontrar relax y armonía.

Otros vienen a ver las edificaciones coloniales, conocer la cultura, la historia y las tradiciones.

Pero sin duda alguna, la cultura y las tradiciones de cualquier país empiezan con su gente. Cuba puede tener mucha historia, muchas playas bonitas, muchos lugares interesantes, pero la mayor riqueza que tiene está en su gente, en la manera de ser de sus mujeres y de sus hombres.

Veamos, cómo son los hombres cubanos:

El hombre cubano no puede vivir sin «piropear»

Una de las cosas más simpáticas (cuando no cae en vulgaridad) que caracteriza a un hombre cubano es su arte de “piropear”.

El hombre cubano no escatima a la hora de piropearle a una mujer. El piropo forma parte de la idiosincrasia de los cubanos. Es algo muy común que se oye en las calles cubanas diariamente y a toda hora. Estos son algunos de los típicos piropos cubanos para las mujeres:

• Si cocinas como caminas me como hasta la raspita
• ¡Niña! Estás como me la recetó el médico
• Eres tan dulce, que solo con mirarte engordo
• Perdí mi número de teléfono, ¿me das el tuyo?
• Y luego dicen que las flores no caminan.

El hombre cubano se considera bastante machista

Está claro que cada caso es diferente y hay excepciones. Pero en la mayoría de los casos, a los varones desde temprana edad se les enseña que el sitio de la mujer en la casa está en la cocina. Las que limpian la casa, friegan los platos, bañan a los hijos, cocinan y lavan, después de trabajar 8-10 horas diarias, son las mujeres. Se considera que este tipo de faenas le toca solo a la mujer, pues son tareas puramente femeninas.

Pero hay que reconocer que últimamente se nota que las nuevas generaciones son cada vez menos machistas, y sin pena comparten las tareas del hogar con las mujeres, aparte de atender a los hijos y a los familiares.

El hombre cubano es celoso

Los hombres cubanos se consideran gente de sangre caliente. Son intensos y explosivos en todo lo que hacen. La mayoría son hombres muy celosos, en ocasiones hasta dispuestos a desencadenar una pelea si se diera el caso.

El hombre cubano es atractivo

Eso sí, los cubanos tienen una magia que atrae a las mujeres, saben seducir con la mirada y convencer con las palabras. No tienen pena a la hora de conquistar a una mujer. Además, son gente que se cuidan mucho el porte y aspecto, al punto de no salir a la calle sin antes echarse gel en el cabello y un perfume bien rico. Tratan de estar siempre a la moda, mantener una buena higiene personal y una imagen bien presentable.

El hombre cubano es trabajador

Aunque existe una imagen del hombre cubano como vago y apolítico, es erróneo. El hombre cubano es “luchador”. A pesar de la falta de condiciones, el cubano siempre inventa, busca, ingenia, resuelve para poder darle comida a su familia.

El hombre cubano es mujeriego

Es que los cubanos llevan en la sangre tanta pasión, atracción y encanto, que eso también los hace propensos a muchas tentaciones. Siempre habrá alguien quien diga lo contrario, pero la mayoría estaría de acuerdo con esta afirmación…

Los hombres cubanos son “buenos amantes”

Como casi a todos los hombres, a los cubanos les encanta el sexo. Es uno de los temas más importantes en la relación con su pareja. Los cubanos tienen una gran imaginación y saben entregarse al máximo, por lo cual piden lo mismo de su pareja y si no lo reciben son capaces de romper con la relación, aunque no haya desacuerdos en los demás temas…

El hombre cubano es “buen padre”

Los cubanos aman a sus hijos ciegamente y tratan de estar en sus vidas a tiempo completo. Muchos hombres se convierten en seres más tiernos y dóciles al lado de sus hijos.  Saben ser buenos padres, sea suyo el hijo o del pasado de su pareja.

El hombre cubano es romántico

Adoran los besos, las caricias, los halagos, los mimos y los abrazos. De su parte, no escatiman en halagar y mimar a su mujer. La llenan de piropos y la tratan como una reina, si están de buen ánimo claro 🙂

Algunas formas tiernas que suelen usar para llamar a sus parejas son: mi amor, mami, mi vida, corazón, mi niña, bombón, mi tesoro …

Los cubanos “se mueven” muy bien

No es secreto que el ritmo lo llevan en la sangre. Apenas existen cubanos que no sepan bailar casino o reggaetón. Aman el baile y lo disfrutan de verdad, sudando la gota gorda.

El humor de los cubanos es singular y les gusta bromear a toda hora (dar chucho)

El ejemplo más evidente es que se burla de su propia realidad. El teatro y el cine son dos de los escenarios donde más ello se muestra. Y en la cotidianidad, siempre van a sacar un chiste de cualquier circunstancia, por muy dura que sea.

Los hombres cubanos son orgullosos

No se sabe si es infundado por una especie de rebeldía mambisa o la propia mezcla de sus raíces, lo cierto es que se respetan bastante a sí mismos y como se diría, “en buen cubano”, no se dejan pasar una. Claro, a estas alturas es algo que muchos se cuestionan, pero en aspectos personales, así son.

Esta es una visión meramente subjetiva, de alguien que, sin haber nacido y crecido en la isla, le ha tocado (por elección propia) estar muy cerca de los cubanos.

Si crees que algo no es así o deseas aportar elementos nuevos, pues bienvenidos sean los comentarios. Esperen una versión dedicada a la mujer cubana, que también posee características muy excepcionales.

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