Cuba: 683 protestas en marzo por hambre, apagones y represión

Cuba enfrenta creciente represión, protestas por hambre y apagones, mientras activistas luchan por visibilizar la crisis social y política. (Foto © Periódico Cubano)

El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC) registró un total de 683 protestas, denuncias y acciones cívicas en Cuba durante el mes de marzo de 2025, lo que representa un aumento significativo del 41.7% en comparación con las 609 contabilizadas en febrero de 2025.

Esta cifra también muestra un incremento del 4.25% frente a las 654 protestas registradas en marzo de 2024. El Observatorio atribuye este repunte a la persistente voluntad de activistas y periodistas independientes, quienes continúan documentando las demandas sociales a pesar de las restricciones impuestas por la represión gubernamental.

En el ámbito social, el principal desencadenante de las protestas fue la grave situación de la alimentación, la inflación y la agricultura en Cuba. La escasez de productos básicos, como aceite de cocina, café y sal, ha intensificado las quejas populares.

Un caso emblemático fue el de Mayelín Carrasco, una madre de tres hijos, quien se rebeló contra la crisis alimentaria y el abandono gubernamental en la plaza de Río Cauto, en Granma. La protesta, que provocó una movilización de residentes locales, reflejó la desesperación de los cubanos, quienes recurren a medidas extremas como la caza de animales para sobrevivir.

La situación se agrava aún más debido a los apagones recurrentes. En marzo, Cuba vivió su cuarto apagón nacional en menos de seis meses, con un corte de electricidad que duró casi 72 horas.

El evento afectó gravemente la vida diaria de los cubanos: se interrumpieron los suministros de agua, la producción de pan, el curso escolar y se reportó la muerte de una persona que no pudo recibir atención médica a tiempo. En hospitales, como el de Cienfuegos, los médicos tuvieron que recurrir a linternas de teléfonos móviles para continuar procedimientos quirúrgicos.

En términos de represión, el OCC documentó un aumento en los actos represivos, que pasaron de 67 en febrero a 115 en marzo. Las autoridades intensificaron las persecuciones contra opositores, activistas y miembros de la sociedad civil, con hostigamientos y amenazas constantes.

En un caso notable, el cubano Alexander Mario Fábregas fue condenado a siete años de prisión por sus publicaciones en redes sociales. Además, el gobierno cubano continúa con la política de encarcelar a más de 800 presos políticos, a pesar de las promesas de excarcelaciones impulsadas por el Vaticano.

Las protestas por la inseguridad ciudadana también marcaron un incremento. En marzo se registraron 108 denuncias relacionadas con la violencia social y criminal, lo que incluye un saldo de 13 muertos y 11 desaparecidos. Entre las víctimas se encuentran tanto ciudadanos cubanos como un turista canadiense, y la violencia tiene un componente de lucro, con el robo de motocicletas eléctricas como una nueva modalidad delictiva.

A nivel de salud, la situación sigue siendo crítica. Se confirmaron múltiples denuncias sobre el mal estado de los servicios médicos en el país, destacándose el caso del niño Damir Ortiz, quien fue diagnosticado erróneamente con linfoma de Burkitt por el Instituto de Hematología de Cuba. Este error fue descubierto en un hospital de Miami, después de que el niño fuera trasladado allí gracias a la ayuda de activistas.

Por otro lado, el gobierno ha comenzado a tomar medidas drásticas contra los familiares de mendigos, a quienes amenaza con sanciones si no se hacen cargo de sus parientes. Además, sigue creciendo la preocupación por el aumento del consumo de drogas entre los jóvenes cubanos, mientras que los operativos policiales no logran frenar esta tendencia.

En un contexto de creciente desesperanza, Sor Nadieska, Superiora de las Hijas de la Caridad en Cuba, expresó el sentimiento generalizado de frustración en el pueblo cubano. En una publicación reciente, manifestó: “¡Basta ya! Gritamos quienes en conciencia nos rebelamos contra tanta mentira, contra tantas promesas incumplidas, contra tanta injusticia”.