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Derrame de 60 mil litros de petróleo en accidente de trenes provoca “considerables afectaciones”
Autoridades del Citma recomiendan no tomar el agua de pozos hasta que se hagan pruebas de laboratorio
El choque de trenes ocurrido el pasado sábado en la zona de Guayos, perteneciente al municipio espirituano de Cabaiguán, provoca “considerables afectaciones” luego de que un vagón cargado con 60 mil litros de petróleo crudo se derramaran.
Según la versión oficial de Carlos Enríquez Díaz Bernal, director adjunto de la Refinería Sergio Soto en Cabaiguán, las labores se centran en recuperar el crudo derramado, instalando barreras de contención para evitar el avance de la sustancia corrosiva.
Una de las mayores preocupaciones de la población es que el hidrocarburo pueda contaminar los pozos de agua potable, única vía que tiene la comunidad para acceder al vital líquido. Por el momento, el delegado del Citma en Sancti Spíritus, Leonel Díaz Camero, recomendó evitar el consumo de estas fuentes de abasto de agua hasta obtener resultados definitivos de las pruebas de laboratorio que se ejecutarán en los próximos días.
Hasta el lugar de los hechos se han trasladado brigadas de la planta refinadora, así como oficiales de las Fuerzas Armadas y el Ministerio del Interior. Por la magnitud del evento también se personaron Deivy Pérez Martín, primera secretaria del Partido en Sancti Spíritus, y Alexis Lorente Jiménez, gobernador provincial, junto a otras autoridades locales.
Un equipo de peritos investiga las causas del siniestro, pero ya el propio Ministro del Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, insinuó un error humano como detonante del choque. Hubo un “incumplimiento del reglamento de operaciones de los ferrocarriles”, dijo Rodríguez Dávila.
El incidente ocurrió a las 7:10 a.m., cuando un tren procedente de los yacimientos de crudo al norte de Ciego de Ávila que se dirigía la refinería de Cabaiguán cargado de petróleo crudo colisionó con otro tren de carga que transportaba recursos desde la Zona Especial de Desarrollo del Mariel hacia Camagüey.
Ese tramo de línea sigue cerrado al tránsito, aunque las autoridades de la Unión de Ferrocarriles confirmaron que la línea no sufrió daños. Una vez que se retiren los vagones siniestrados se restablecerá la circulación.
El incidente ha generado indignación y críticas en redes sociales. Muchos cubanos cuestionaron cómo pudieron chocar dos trenes en un país con tan escasa circulación ferroviaria. “No entiendo. Con tan pocos trenes funcionando, ¿cómo es posible este accidente?”, comentó un usuario.
Otros destacaron la negligencia como causa probable. “Es doloroso perder recursos esenciales por un error que pudo evitarse”, escribió una residente local. Además, varios usuarios exigieron transparencia en la investigación y sanciones para los responsables.
El accidente ocurre en un momento crítico para Cuba, donde la escasez de combustibles afecta la generación eléctrica y el transporte. La pérdida de crudo intensifica las dificultades en medio de una situación económica precaria.