Importaciones de pollo estadounidense a Cuba caen el primer semestre de 2024

La carne de pollo desde EEUU llega a Cuba por la vía marítima. (Captura de pantalla © Canal Caribe – YouTube)

Las importaciones de carne de pollo estadounidense a Cuba disminuyeron en el primer semestre de 2024 con respecto a igual etapa del año precedente, y este pudiera ser el primer indicador del freno puesto por el sector privado (TCP y Mipymes), tras la política de tope de precios establecida por el régimen castrista.

El economista cubano Pedro Monreal afirma que el nivel inferior de las toneladas de carne de pollo exportadas a Cuba “indica el carácter problemático del supuesto oficial de que los topes fijos de ganancias y precios en Cuba pudieran estabilizar precios bajos en condiciones de menor oferta”.

Las cifras del Departamento de Agricultura de EEUU muestran que todas las exportaciones del mencionado alimento hacia Cuba fueron contratadas para ser comercializadas por diversos tipos de entidades, incluyendo estatales, cooperativas y Mipymes. No se da información desagregada sobre los distintos compradores. El tope de precios comenzó en junio pasado, por lo cual el verdadero impacto se apreciaría con los datos de los meses venideros.

En los primeros seis meses del actual año, EEUU exportó 127 mil toneladas de pollo a Cuba, el equivalente a aproximadamente 5.000 contenedores. Pese a ser menos cantidad, llegar a esa cifra significó un gasto de 7%, pues el precio de cada tonelada aumentó como parte de la inflación generalizada a nivel mundial.

El incremento en el valor de las importaciones a 150.9 millones de dólares supera el total anual de las importaciones de maíz o leche en polvo de Cuba en 2022.

En términos mensuales, las exportaciones de pollo a la Isla crecieron un 15.5% en toneladas y un 6% en valor en junio de 2024, siguiendo la tendencia oscilante típica de las exportaciones mensuales. El precio del kilogramo de este producto en junio fue de 1.23 USD, inferior al del mes anterior de 1.34 USD.

Las exportaciones de carne de pollo de EEUU representan la principal fuente de proteína animal en la Mayor de las Antillas, compensando la crisis agropecuaria nacional que aún no muestra señales de mejora. La continua dependencia de las importaciones del producto subraya la incapacidad del sector agropecuario cubano para satisfacer la demanda interna.

El impacto de la reducción en las importaciones de pollo se siente en el mercado local cubano, donde la oferta de proteínas es limitada. La situación podría empeorar si los precios continúan subiendo y las políticas de control de precios no se ajustan para reflejar las realidades del mercado internacional.