Juez anula ‘parole in place’: miles de migrantes se quedan sin papeles en EEUU

A la administración de Joe Biden solo le quedan 73 días y se ve difícil que tengan tiempo para apelar la decisión judicial. (Foto © Periódico Cubano)

Un juez federal ha emitido un fallo que suspende la política de parole in place de la administración de Joe Biden, una medida que permitía a cónyuges de ciudadanos estadounidenses obtener un estatus legal temporal en Estados Unidos.

Periódico Cubano pudo comprobar en las actas de la corte que el federal en Texas, J. Campbell Barker, argumentó que el Poder Ejecutivo no tiene autorización del Congreso para implementar esta política, afirmando que la interpretación de la ley por parte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) “estira la interpretación legal más allá de su límite”.

La anulación del beneficio migratorio impacta a cerca de medio millón de personas, quienes evitaban la deportación y obtenían permisos de trabajo mientras tramitaban la residencia. Ahora, quedan sin la opción de conseguir sus papeles de regularización migratoria.

El fallo fue el resultado de una demanda presentada por Texas y otros 15 estados republicanos, quienes argumentaron que el programa impondría costos significativos en servicios públicos como salud, educación y seguridad. Alabama, Arkansas, Florida, Georgia, Idaho, Iowa, Kansas, Luisiana, Dakota del Norte, Ohio, Carolina del Sur, Dakota del Sur, Tennessee, Texas y Wyoming, junto con la organización America First Legal, cuestionaron la constitucionalidad del programa.

Durante el proceso, Barker también rechazó la solicitud de intervención de los beneficiarios, cuyos testimonios buscaban defender la política.

La decisión de suspender esta política, iniciada en medio de la campaña electoral del Partido Demócrata, ha desatado reacciones de preocupación entre defensores de los derechos de inmigrantes, quienes argumentan que la medida afecta desproporcionadamente a familias que han construido su vida en EEUU y que ahora podrían enfrentarse a la deportación.

A la administración de Joe Biden solo le quedan 73 días antes de que tengan que entregar el poder al presidente electo Donald Trump. Aunque puede apelar la decisión del juez federal, su capacidad para preparar la apelación puede verse limitada.

En EEUU, el sistema de separación de poderes divide al gobierno en tres ramas independientes: el ejecutivo, el legislativo y el judicial, cada una con facultades de control sobre las otras. El poder judicial, a través de la “revisión judicial”, puede declarar inconstitucionales políticas del ejecutivo o leyes del legislativo.

Esto permite a los tribunales suspender temporalmente la implementación de órdenes presidenciales o políticas gubernamentales si consideran que violan la Constitución o las leyes. Cualquier persona puede presentar una demanda para cuestionar una política, y un juez puede bloquear su ejecución con una “orden de suspensión” mientras se resuelve el caso. Este mecanismo asegura que el presidente y las agencias gubernamentales respeten las leyes.