FARÁNDULA
‘La Flaca Verónica’ regresa a Cuba tras dos años en Estados Unidos
El comediante cubano Eduardo López Cardoso genera reacciones mixtas, con su visita a la Isla, entre sus seguidores
El comediante cubano Eduardo López Cardoso, conocido en redes sociales como “La Flaca Verónica”, ha vuelto a Cuba tras dos años de haber emigrado a Estados Unidos.
Su llegada a la Isla ha generado reacciones diversas entre sus seguidores, quienes han compartido sus opiniones en redes sociales. Mientras algunos aplauden su decisión, otros cuestionan su regreso al país del que partió tras enfrentar difíciles circunstancias.
Aunque Cardoso no ha compartido imágenes de su visita, el influencer Un Martí To Durako publicó en su cuenta de Instagram una fotografía del humorista bajándose de un automóvil de renta y abrazando a un amigo de su barrio en Camagüey. Este emotivo reencuentro no ha pasado desapercibido entre sus seguidores.
Un comentario en redes destacó: «Qué abrazo más lindo, bendiciones», reflejando el apoyo y cariño de parte de su audiencia. Sin embargo, no todas las opiniones han sido positivas, ya que algunos lo critican por regresar al país que decidió abandonar hace apenas 24 meses.
El viaje de Eduardo López Cardoso ha desatado un debate entre quienes entienden su necesidad de reencontrarse con su familia y quienes consideran que volver a Cuba, tras emigrar, es contradictorio.
«Flaco, se te quiere mi brother, disfruta tus vacaciones con los tuyos», expresó un amigo cercano del comediante, evidenciando el respaldo de sus conocidos más cercanos.
Cardoso llegó a EEUU en septiembre de 2022, tras un extenso y difícil recorrido que comenzó cuando salió de Cuba rumbo a Nicaragua. En una entrevista concedida poco después de su llegada a Miami, reconoció que el mayor sacrificio de su decisión fue separarse de su familia, especialmente de su madre, con quien mantenía una relación muy estrecha.
Durante esa conversación, el comediante confesó: «Yo decidí salir de Cuba porque no veía otra salida. Mi mamá me apoyó desde el primer momento, aunque sabía lo mucho que nos íbamos a extrañar».
El proceso migratorio de López Cardoso no fue fácil. Durante su estancia en Tapachula, México, vivió momentos de gran incertidumbre y estuvo al borde de entregarse a las autoridades migratorias para ser deportado a Cuba. A pesar de las dificultades, logró continuar su viaje hacia Miami, donde finalmente se asentó.