Cachorros de Rottweiler por 6.268 CUP: El lucrativo negocio del Gobierno cubano

Cachorros de Rottweiler por solo 6.268 CUP lucrativo negocio del Gobierno cubano (Foto: Periódico Cubano)

El Centro Nacional para la Producción de Animales de Laboratorios (Cenpalab), perteneciente al conglomerado estatal BioCubaFarma, oferta la venta de mascotas recién nacidas con estratosféricos precios en lo que constituye un lucrativo negocio para el Gobierno cubano.

Un cachorro de Rottweiler de solo 3 meses de nacidos está valorado en 6.268 pesos cubanos, lo cual es casi 3 veces el salario mínimo de Cuba.

Este comportamiento ha sido denunciado por el grupo de Cubanos en Defensa de los Animales (CEDA) que se opone a la comercialización de estas mascotas pues en la cadena de negocio el único fin del gobierno cubano es la reproducción acelerada para incrementar los ingresos.

“La venta de animales se opone a la causa animalista porque los animales son utilizados para reproducir y a los que nacen de la reproducción los venden a cualquiera que pague su precio”, se puede leer en la declaración emitida por CEDA en su perfil de Facebook.

“La comercialización fomenta el maltrato, sobre todo la reproducción en fábricas de animales como esta”, añade el comunicado que adjunta una fotografía tomada a la entrada del Cenpalab donde se promociona la venta de animales afectivos.

Según CEDA “vender animales, y venderlos además sin esterilizar, es fomentar más el abuso animal, pues fomentará la cría de perros como negocio -a partir de esos perros que se compran sin esterilizar- y por tanto su explotación y maltrato, también el de su descendencia”.

La cuestión del cautiverio y hacinamiento en los habitáculos de reproducción es otro tema tratado por el grupo defensor de los animales, que ha sido muy activo al pedir una Ley de Protección Animal de la que aún no se conoce el contenido.

“Estos cachorros y ejemplares adultos que se venden son producto de la explotación de animales que han nacido y vivido toda su vida en cautiverio. Los animales en cautiverio, en centros como CENPALAB, se les garantiza un espacio mínimo para vivir -la jaula o caja- se les limpia, se les provee de agua y temperatura adecuada, y se vigila su estado de salud, PERO son objetos vivos productivos, objetos al fin y al cabo. No se les enriquece, no se les socializa cómo verdaderamente necesitarían”.

El problema va más allá, pues desde CEDA se cuestiona en cuáles manos caerán esos animales que se venden por parte del Estado.

“¿Hará CENPALAB un chequeo mínimo de los compradores?, ¿cómo hacen los grupos de adopción, para intentar dar el animal en manos responsables? Por supuesto que no, porque el interés es hacer dinero y no el beneficio de los animales ni la perpetuación de la raza”, exponen en la declaración.

Hasta el momento no ha trascendido una respuesta oficial de parte de BioCubaFarma sobre los hechos expuestos por el grupo defensor de los animales.