Centros de aislamiento en Bauta no pueden con el rebrote de COVID-19

Los centros de aislamiento por coronavirus en Bauta se encuentran llenos “a tope”, según informó la prensa local de este municipio en Artemisa.

El brote surgido supuestamente tras la fiesta de tambores lleva confirmados 63 contagios a la fecha, por lo que los centros de aislamiento que ya estaban vaciándose en medio de la fase tres “post” pandemia ahora tienen dificultades para acomodar a los nuevos infectados.

La duda que surge sobre el origen de los nuevos casos es que el tiempo de incubación es de solo 14 días y las autoridades habían reportado menos de una decena de casos diariamente desde hace varias semanas, por lo que en teoría no debería haber fuentes de contagio para la incidencia que se está dando últimamente.

El gobierno cubano ha presumido durante todo julio, en sus medios oficiales y a través de Twitter, de haber “vencido” a la pandemia, algo apresurado considerando que incluso empezó a despejar sus centros de aislamiento.

Ahora la reactivación de estos centros en Bauta no fue suficiente y se vieron en la necesidad de abrir otros espacios adicionales, pues para el cierre de julio se encuentran saturados, según informó El Artemiseño.

Según la directora provincial de Salud Pública, Yanelis Amador Borrego, actualmente tienen funcionando 12 centros de aislamiento para los contactos de casos positivos y quienes sean sospechosos de presentar el virus,  que serían descartados en un plazo de entre 20 y 30 días.

La incidencia en la región hizo necesario que se dispusieran de habilitar el seminternado Ciro Redondo y otras instalaciones como dos escuelas en la localidad y la academia de la Pesca.

👉En el caso de #Artemisa, "se orienta el empleo obligatorio del nasobuco, así como el cierre de todos los bares, y el cierre de las playas de Caimito y Bauta. Además, el consejo popular Baracoa entra en cuarentena", informan medios localeshttps://t.co/SlAO4KvPQM

— Radio Nuevitas (@emisoranuevitas) July 30, 2020

Solo hasta el 29 de julio, la provincia de Artemisa había trasladado 456 personas, un número exponencialmente alto, considerando que la capacidad máxima es de 560 camas entre todos los centros.

Del total solo 60 se encuentra disponible para sospechosos, mientras que el restante está para contactos de casos ya confirmados, siendo el problema que diariamente se define el aislamiento de más de 60 personas.

El brote en Artemisa llega en medio de la reapertura económica que el régimen cubano esperaba desde junio, de cara a la reactivación de los aeropuertos y de recibir al turismo internacional, aunque lo cierto es que Cuba nunca fue declarado como destino seguro para los visitantes extranjeros.