Cubanoamericano, vicepresidente en Apple: “he enseñado a los americanos a comer sandwiches cubanos”

Eduardo (Eddy) H. Cue, hijo de emigrantes cubanos nacido en Miami, tiene a su cargo uno de los proyectos más importantes del gigante tecnológico Apple, donde ocupa en la actualidad el puesto de vicepresidente senior.

Hace solo unas horas fue entrevistado en el programa matinal Un Nuevo Día de la televisora Telemundo 51 donde contó parte de su vida y la de su familia que debió emigrar para que él disfrutara de la libertad y tener las oportunidades en otro sitio ante la llegada al poder en Cuba, por la vía armada, del dictador Fidel Castro.

Cuando los padres de Cue arribaron a EEUU les tocó trabajar como empacadora de carnes, ella y su papá se dedicó a ser luminotécnico, y con esos empleos tan “duros” lograron enviarlo a la universidad

“Mis padres que todavía viven en Miami trabajaban muy duro, empezaban desde las 7:00 am y no llegaban a la casa hasta las 7:00 pm”, reveló Eddy, graduado de la Universidad Duke, y miembro además de la junta directiva de Ferrari y FanSnap.

“Es una cosa muy grande para ellos, porque ninguno de los dos fueron a la universidad, cuando estaba en el 12 grado encontré una computadora, y para mí fue una cosa muy grande, porque enseguida que empecé a usarla sabía que era lo que yo quería hacer en la vida”, confiesa el cubanoamericano.

Desde su llegada a Apple estuvo vinculado al proyecto iTunes, la plataforma de música de la compañía y ahora dirige el Apple Card, una división que pretende dotar a los usuario fieles de la empresa de una tarjeta de crédito digital que en su opinión hará que “el dinero en cash y las tarjetas de plástico una cosa del pasado”.

“Queríamos cambiar todo eso y hacer una cosa que sea muy simple, transparente, y privado. La tarjeta no tiene ningún número en ella, entonces la gente no puede copiarlo, si la usas por el teléfono, los números son diferentes… si cambia de color a naranja, estás mirando que estás gastando mucho a lo mejor saliendo a comer”, explicó sobre el proyecto Apple Card.

En un aparte curioso de su vida confesó que ha “enseñado a muchos americanos a comer sandwiches cubanos y café cubano” y además como todo buen cubano le gusta mucho el arroz y picadillo con tostones.