El Papa Francisco aboga por rechazar al “dios del dinero”

En vísperas del día 6 de enero, Día de los Reyes Magos, el papa Francisco celebró una misa por el rezo del Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico Vaticano, donde llamó a rechazar “al dios del dinero” así como el consumismo, el placer, el éxito y el ego.

Desde la Basílica de San Pedro, el máximo líder de la iglesia católica pidió a los fieles que se concentren en lo esencial y se deshagan de “cosas inútiles y adiciones” cuando lo que realmente importa es servir al prójimo.

“Los cristianos deberían ayudar a los que sufren en los márgenes de la sociedad. La fe no es solo un conjunto de bellas doctrinas sino un llamado a amar a Dios”, expresó Francisco al tiempo que recordaba las fiestas de la Epifanía, que dan por concluidas oficialmente las festividades de Navidad.

Este es el significado de la Navidad. Si el Señor sigue viniendo entre nosotros, si sigue dándonos el don de su Palabra, es para que cada uno pueda responder a esta llamada: hacerse santo en el amor. #Ángelus

— Papa Francisco (@Pontifex_es) January 5, 2020

El Sumo Pontífice también aludió al viaje que, según las enseñanzas cristianas, realizaron los tres Reyes Magos para llevar regalos al niño Jesús sobre ellos dijo que “vinieron de Oriente a Belén, siguiendo a la estrella, para visitar al recién nacido Mesías”.

“Estos sabios, que vienen de regiones lejanas, después de haber viajado mucho, encuentran a quien querían conocer, después de haberlo buscado durante mucho tiempo, ciertamente también con dificultades y aventuras. Y cuando finalmente llegan a la meta, se postran ante el Niño, lo adoran y le ofrecen sus preciosos regalos. Después de lo cual partieron nuevamente sin demora para regresar a su tierra. Pero aquel encuentro con el Niño los cambió”, señaló el Papa.

“La experiencia de Dios no nos bloquea, sino que nos libera; no nos aprisiona, sino que nos pone de nuevo en el camino, nos devuelve a los lugares habituales de nuestra existencia. Los lugares son y serán los mismos, pero nosotros, después del encuentro con Jesús, no somos los mismos que antes. El encuentro con Jesús nos cambia, nos transforma”, afirmó el primer Papa latinoamericano de la historia.