La izquierda y Pedro Castillo pueden ganar en Perú

Elecciones en Perú: Izquierdista Pedro Castillo se perfila como ganador sobre Keiko Fujimori. (Collage. Twitter-Castillo/Fujimori)

Tras más de 24 horas de cerradas las urnas en Perú, los resultados de las elecciones presidenciales aún no son definitivos, pero la tendencia parece indicar que el candidato de extrema izquierda Pedro Castillo resultará ganador sobre la representante de la extrema derecha, Keiko Fujimori, hija del expresidente peruano Alberto Fujimori.

Según datos de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), con casi el 95% de los votos contabilizados el candidato de Perú Libre aventaja a Fujimori con 50.28% por 49.72%. La mayoría de los votos faltantes provienen de zonas rurales y apartadas donde Castillo tiene su base electoral, por lo cual no parece que la represente de Fuerza Popular pueda revertir el margen que la separa, pese a ser muy estrecho.

En el último reporte del ONPE emitido a las 20:30 hora local de este lunes cada candidato acumulaba más de 8 millones de votos, con una diferencia para Castillo de 95.508 votos, lo cual refleja un electorado dividido prácticamente a la mitad.

Las estadísticas también muestran un buen nivel de participación, pues el estimado de votante que asistieron a las urnas es superior al 76% de todos los que tenían derecho. La cifra es alta para los estándares latinoamericanos, sobre todo en tiempos donde la región atraviesa una enorme crisis sanitarias producto de la pandemia de coronavirus.

¿Quién es Pedro Castillo?

José Pedro Castillo Terrones nació el 19 de octubre de 1969 y se graduó de profesor, aunque en su juventud fue rondero e incluso llegó a ser dirigente nacional de la Organización de rondas campesinas.

Como docente de primaria y presidente del Comité de Lucha de las bases regionales del SUTEP, Castillo se hizo conocido a nivel nacional por ser el principal dirigente en la huelga magisterial de 2017.

En política, Castillo ha sido miembro del comité de Cajamarca de Perú Posible, partido por el cual postuló a la alcaldía de Anguía sin conseguir el cargo en 2002. En 2020 anunció su postulación a la presidencia de la República por el partido político Perú Libre y logró pasar a segunda vuelta.

Durante su campaña política prometió que de ser elegido presidente del Perú cambiaría la constitución política mediante la convocatoria de una Asamblea Constituyente, para que el estado peruano tenga mucha más participación en la economía peruana, e impulsaría una “revolución educativa” para mejorar la calidad de la enseñanza pública.

Asimismo, mencionó que desactivaría la Defensoría del Pueblo del Perú, aunque luego señaló no querer desactivarla, sino reforzarla “en beneficio de los más vulnerables”.

Precisamente este “compromiso social” de extrema izquierda para los estándares de la política peruana es la razón por la cual el gobierno cubano se frota las manos, pues muy posiblemente Castillo impulsará la contratación de médicos cubanos y otros profesionales que el régimen comunista de La Habana vende como mano de obra para aumentar los ingresos de las arcas del Estado, mientras a los profesionales cubanos solo les toca una pequeña parte.