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Guardafronteras de Cuba detienen a dos lancheros en Caibarién
Más de 20 personas iban a salir de la playa de Caibarién
Detenidos por organizar una salida ilegal desde Cuba (Foto: Javier Rivero Betancourt – Facebook)
Guardafronteras del régimen detuvieron a dos lancheros que pretendían sacar de manera ilegal a unas 22 personas desde la playa de Caibarién, en Villa Clara, según un post en redes sociales.
El usuario Javier Rivero Betancourt dijo en Facebook que los lancheros están identificados como Jorge Alberto Parrado, alías “El Chifla”, y su hermano Gustavo Parrado.
“El régimen tiene militarizadas las playas cubanas y no dejan que los cubanos necesitados se vayan del país”, manifestó Rivero Betancourt al compartir fotografías de la lancha y los detenidos.
El internauta agregó que los hermanos podría ser sentenciados a 30 años de prisión por organizar una salida ilegal y los implicados en el viaje recibirían una condena de 15 a 20 años.
(Foto: Javier Rivero Betancourt – Facebook)
La salida iba a ser muy similar a una que ocurrió hace unos días y fue interceptada por agentes de la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) cuando la embarcación estaba frente a la costa de Elbow Cay, en Bahamas.
Un comunicado de la agencia de seguridad marítima indica que en la lancha había 24 cubanos que fueron repatriados por la tripulación del guardacostas Charles David Jr. y el dueño del navío quedó bajo custodia estadounidense por ser sospechoso de tráfico de personas.
En lo que va del actual año fiscal unos 745 cubanos han sido interceptados por guardacostas estadounidenses, una cifra muy superior a lo registrado en los tres periodos anteriores.
Hace un par de días, la USCG informó sobre el regreso a la Isla de 14 cubanos detectados cerca de Key West en dos eventos diferentes. Una parte iba en balsa inflable y otra a bordo de una embarcación improvisada.
Ante el aumento de balseros procedentes de la Mayor de las Antillas, Mario Gil, oficial de enlace de la USCG en la Embajada de EEUU en La Habana, ha reiterado en varias ocasiones lo peligroso que es el estrecho de Florida para embarcaciones rústicas.
El comandante pide a los navíos particulares reportar cualquier caso de balseros para que agentes de la guardia costera rescaten a los ilegales antes de que sean víctimas de un naufragio.
Los cubanos interceptados reciben agua, alimento y atención médica básica, además existe la oportunidad de acceder a una entrevista para demostrar miedo creíble y no ser repatriado.
La mayoría de los balseros devueltos son castigados por el régimen y algunos hasta viven acosados por agentes de la Seguridad del Estado para que no intenten otra salida.
