Negligencia del Estado, causa del derrumbe en La Habana Vieja

Luego de que tres niñas fallecieran este lunes a causa de un derrumbe en La Habana Vieja, algunos vecinos del lugar aseguran que se trató de una negligencia por parte de las autoridades, que nunca acordonaron el edificio.

“Tuvo que pasar esto para que apuntalaran el edificio”, dijo un residente a CubaNet, mientras las grúas y los trabajadores aseguraban el local que causó la tragedia.

Lisnavy Valdés, María Carla Fuentes y Rocío García fueron las víctimas fatales del derrumbe de un balcón en las calles Vives y Revillagigedo, frente al parque y la Iglesia de Jesús María, en La Habana Vieja.

Según testigos, las niñas de entre 10 y 11 años estaban ensayando para una actividad que su primaria realizaría este martes con motivo del natalicio de José Martí.

Carmen, compañera del sexto grado donde cursaban las tres, narra que cruzaron la acera y, “de momento, se cayó el balcón”.

Manuel, otro de los vecinos, relató que en cuanto sintió el estruendo del derrumbe, corrió a ayudar.

“Sacamos primero a una que estaba vestida de uniforme. La madre se le echó a llorar encima, se la quitamos y la montamos en un carro, para el hospital. Cuando fui a cargar a la segunda se le cayó el cerebro para el piso, y también la montamos en un carro. A la tercera ya no pude aguantar más, porque empecé a sentirme mal y a vomitar”, explicó visiblemente afectado por el recuerdo del suceso.

Dos de las niñas fallecieron en el lugar, al momento del derrumbe, mientras que la tercera murió en el hospital.

El edificio estaba deshabitado y se encontraba en proceso de demolición desde hacía más de un año.

Los vecinos denuncian la negligencia de las autoridades municipales, pues el accidente pudo evitarse, pero aunque se empezó a demoler el lugar desde meses atrás por la parte trasera, el área no se acordonó ni se señalizó de ninguna manera.

Otros declaran que la tardanza en la demolición se debía a que los trabajadores vendían los ladrillos.

Este es el segundo derrumbe con consecuencias fatales que sucede en La Habana en lo que va de año. Solamente en 2019 se registraron más de 750, aunque gran parte de ellos producto del tornado del pasado 27 de enero de 2019, el mal estado de los edificios contribuyó.

Mientras el régimen invierte en la construcción de lujosos hoteles, en La Habana Vieja los edificios familiares se derrumban o se encuentran en riesgo, muchas veces provocando muertes y con cientos de familias en albergues en condiciones deplorables.

Los vecinos del área explican que las autoridades municipales llegaron inmediatamente y enseguida acordonaron el lugar, mandaron a recoger los escombros y a asegurar las ruinas, pero lo peor había sucedido.

Lisnavy, María Carla y Rocío serán sepultadas este martes y en el barrio solo están presentes los trabajadores apuntalando las ruinas del edificio. Muchos están en la Funeraria Nacional, apoyando a los familiares e incluso la escuela Quintín Banderas, a donde iban las niñas, canceló sus clases y lo más probable es que la actividad por el natalicio de José Martí se suspendiera también.