“¡Oye policía p*nga!”: El grito que recibió a los Alazanes y desafió a las autoridades en Granma

Cubanos celebran a los Alazanes de Granma. (La Demajagua).

Otro cántico de protesta de los cubanos contra las autoridades se dejó oír, esta vez en Bayamo, en la provincia de Granma, donde la población se reunió para recibir a los Alazanes tras su triunfo en la Serie Nacional de Béisbol y aprovecharon para insultar a la policía.

Los constantes abusos de la Policía Nacional Revolucionaria, con las multas indiscriminadas que reparte entre su población, han llevado a esta última al cansancio lo que se reflejó en el coro de “Oye policía p*nga” que la multitud repitió una y otra vez durante el encuentro.

En un video que ya circula en redes sociales, se escucha a la multitud, que además se encontraba reunida a pesar de las supuestas restricciones por Covid-19 que le han costado multas a tantos.

Lo que las autoridades no esperaban al convocar a los ciudadanos para el recibimiento de sus beisbolistas fueron los gritos contra Policía Nacional Revolucionaria, hecho que fue ignorado por la prensa oficialista.

Así, aunque medios estatales reportaron el “cálido” recibimiento del equipo y los festejos de la población, así como los simbolismos al equipo derrotado, los cocodrilos de Matanzas, nada se mencionó del pequeño gesto subversivo, que sin embargo quedó registrado en redes sociales.

Este es el segundo acto multitudinario de este tipo en lo que va del mes, luego de que apenas este domingo varios cubanos salieran a las calles en el barrio de San Isidro para cantar “Patria y Vida” y en medio de esto gritaran insultos contra el designado presidente Miguel Díaz-Canel.

Al igual que en este caso, en San Isidro no hubo detenciones, probablemente debido a que el número de personas, entre quienes se encontraban a ambos lados de la banqueta como quienes estaban en balcones y ventanas, superaba por mucho al de los oficiales.

La ventaja numérica sobre las autoridades es algo de lo que los cubanos se encuentran cada vez más conscientes, pues también con el tiempo han ido aumentando los casos de enfrentamiento en los que varios ciudadanos logran ahuyentar a la policía, incluso a oficiales que portan armas.