Tratamiento contra la leucemia logra un prometedor resultado

Un prometedor tratamiento contra la leucemia logró una remisión de 10 años en dos pacientes aquejados de la enfermedad, según un estudio publicado en un artículo científico de la prestigiosa revista Nature.

El escrito detalla como Doug Olson y Bill Ludwig, ambos estadounidenses, se han curado de leucemia linfocítica crónica durante 10 años gracias a una terapia experimental con células CAR-T. Dicho tratamiento de inmunoterapia está diseñado para que el propio sistema inmunitario ataque a las células cancerígenas.

Last-resort cancer therapy holds back disease for more than a decade https://t.co/KvXC83ZPmz

— nature (@Nature) February 2, 2022

El caso particular de Olson, quien fue diagnosticado con la enfermedad en 1996, no tuvo resultados con la quimioterapia y en 2009 ante la dificultad de encontrar un donante de médula ósea, decidió participar en un ensayo experimental.

Rectorado por el Centro de Cáncer Abramson y la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania comenzaron a extraerle los linfocitos T, cuyo papel es crucial en el sistema inmunitario, y modificarlos genéticamente para hacer frente al cáncer. Una vez que los linfocitos vuelen al organismo del paciente, este es capaz de identificar las células cancerosas para proceder a su eliminación.

Al pasar una década de iniciada las secciones de tratamiento, los linfocitos modificados mantuvieron su capacidad de reproducirse y acabaron con la totalidad de las células malignas.

Carl June, inmunólogo de la Universidad de Pensilvania y principal responsable del tratamiento, asegura que “con base en estos resultados, podemos decir que CAR-T puede curar a los pacientes; 10 años después, no se pudieron encontrar células de leucemia en su sangre”.

Por su parte, Jan Joseph Melenhorst, autor del estudio en Nature, se expresa en el mismo sentido concluyendo que “las células CAR-T se han mantenido detectables al menos una década después del tratamiento, con remisión sostenida en ambos pacientes”.

Inconvenientes de la terapia con células CAR-T

La terapia CAR-T presenta un inconveniente importante. Las células que tenemos que usar son las del propio paciente. Es decir, para este tipo de terapia tenemos que extraer del paciente linfocitos T, modificarlos, crecerlos en cultivo y luego volver a introducirlos en su organismo. Es lo que se denomina una terapia autóloga.

No se pueden utilizar células T de otro paciente que se modifiquen genéticamente porque esto supone un gran riesgo de sufrir la enfermedad de injerto contra el anfitrión, potencialmente mortal.

Esta enfermedad consiste en que las células que hemos introducido en el paciente atacan a los tejidos sanos del propio paciente, porque los considera extraños. El hecho de que en CAR-T haya que extraer las células del propio paciente para luego realizar todo el proceso alarga mucho los tiempos de tratamiento y los costes.