Testimonios reales y respuestas legales: Willy Allen orienta sobre CBP One, parole e I-220A

Wiily Allen responde preguntas sobre temas importantes migratorios. (Capura de pantalla © María Elvira Salazar-YouTube )

El abogado de inmigración Wilfredo “Willy” Allen, estuvo en el programa de YouTube del periodista Daniel Benítez, y brindó una sesión cargada de respuestas a dudas urgentes que viven los beneficiarios de programas como CBP One, parole humanitario y el temido I-220A.

A través de la transmisión de esta mañana, el abogado respondió a situaciones concretas de personas que hoy enfrentan procesos largos, inciertos o inconsistentes dentro del sistema migratorio estadounidense.

Uno de los puntos más sensibles fue la preocupación sobre la revocación de permisos de trabajo a beneficiarios de CBP One. Allen aclaró que, aunque hay una demanda en curso impulsada por el abogado Mark Prada, esta fue presentada a nombre de un solo individuo. Sin embargo, confía en que este tipo de demandas abrirán la puerta a procesos colectivos que permitan proteger a más migrantes.

“La preocupación más grande que tengo con los CBP One es que los declaren muertos en el sistema del Seguro Social, lo que afecta cuentas de banco, tarjetas de crédito y permisos”, explicó. Aunque esta situación aún no ha afectado a sus clientes, advirtió que, de ocurrir, será un reto legal considerable.

Consultas como la de una madre que preguntó por su hija, quien tuvo sin inconvenientes su cita biométrica, recibieron la esperanza del abogado: “Yo espero que sí le llegue el permiso de trabajo. Este gobierno va a arrastrar los pies, pero eventualmente va a llegar”.

El abogado explica que, en general, el proceso para la obtención de la residencia a veces puede verse retrasado por diversos factores, pero que, en este caso, no hay razón para preocuparse si ya se completó la cita de huellas biométricas, ya que este es uno de los pasos clave en el proceso.

En ese mismo sentido, otro usuario preguntó si podría tener problemas al aplicar a la residencia en agosto si aún no ha presentado asilo. Allen enfatizó en la necesidad de presentar el asilo para proteger el caso si se tiene una corte abierta.

Uno de los testimonios más impactantes fue el de una usuaria cuyo esposo entró por mar, recibió un parole, aplicó a asilo y ya le fue otorgada la residencia. El letrado celebró el caso como una rareza y lo describió como una “doble bendición” por haber obtenido el parole pese a haber llegado en balsa. También se confirmó que, en estos casos, cuando llega la residencia es retroactiva a la fecha de entrada al país.

Otra preocupación fue la de una residente que había recibido la categoría CU8 en lugar de CU6. Allen confirmó que, pese al error, podrá viajar sin problemas, ya que la residencia física es válida.

En un tono más optimista, el abogado comentó la aprobación de varios casos sin corte, puso el ejemplo de una residencia por I-220A segunda casilla, sin corte. Considerando el tema como una grata sorpresa. Detalló que muchos de estos casos han estado esperando más de tres años y finalmente están siendo aprobados con efecto retroactivo.

Al respecto, destacó que cuando no hay corte asignada, el juez no tiene jurisdicción sobre la residencia, y por lo tanto, es más viable que se apruebe directamente por USCIS.

También recalcó la importancia de no faltar a citas biométricas. En un caso, un cubano comentó que no pudo asistir por mal tiempo y luego no reprogramaron su cita. Allen advirtió: “Sin huellas no hay proceso”, explicó el abogado especificando que si la persona no va a su cita de huellas o no la reprograma, pueden considerar el caso como abandonado.

Entre otro de los temas abordados estuvo la duda de una patrocinadora referente a la responsabilidad después de vencer el parole de dos años, el abogado confirmó que si la persona ya es residente o han pasado los dos años del parole, no tiene más responsabilidad legal sobre esa persona.