ESTADOS UNIDOS
Victoria electoral de Trump provoca una suspensión en sus procesos judiciales
Los casos son su presunta interferencia en las elecciones de 2020 y los documentos clasificados encontrados en Mar-a-Lago
La jueza de distrito Tanya Chutkan canceló todos los plazos judiciales pendientes relacionados con las acusaciones contra Donald Trump, a causa de su presunta interferencia en el proceso electoral de 2020. Lo anterior ocurre por su victoria en la pasada elección presidencial que le permitirá un segundo mandato en la Casa Blanca.
Según The Associated Press, la medida responde a la política de larga data del Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) que protege a los presidentes en funciones de enfrentar cargos penales durante su mandato.
El fiscal especial Jack Smith acusó a Trump en 2022 de conspirar para revertir los resultados de esas elecciones presidenciales, y de acumular ilegalmente documentos clasificados en su residencia de Mar-a-Lago.
Sin embargo, el equipo de Smith está evaluando opciones para cerrar ambos casos antes de que Trump asuma la presidencia en enero, dado que, una vez en el cargo, no podría ser procesado bajo las normas actuales del DOJ.
Trump ha denunciado ambos casos como políticamente motivados y ha prometido que despedirá a Jack Smith apenas asuma la presidencia. En una solicitud presentada este viernes en la corte, el equipo de Smith pidió cancelar los plazos judiciales próximos, argumentando que necesitan tiempo para “evaluar esta circunstancia sin precedentes y determinar el curso apropiado a seguir”.
La magistrada concedió rápidamente la petición, ordenando a los fiscales presentar una nueva propuesta antes del 2 de diciembre. El caso electoral contra Trump estaba programado para ser juzgado en marzo del próximo año en Washington.
Más de 1.000 de sus partidarios ya han sido condenados por su participación en los disturbios del Capitolio. Trump, en cambio, ha tenido argumentos para evitar la realización del proceso, entre ellos la inmunidad procesal, debido a que se encontraba en el cargo cuando sucedieron los hechos.
Esta afirmación llegó hasta la Corte Suprema y, en julio pasado, el tribunal determinó que los expresidentes tienen una amplia inmunidad, devolviendo el caso a la jueza Chutkan para que decidiera qué acusaciones podían proceder.
En cuanto al caso de los documentos clasificados, está paralizado desde julio, cuando la jueza Aileen Cannon, designada por el propio Trump, desestimó los cargos alegando que Smith había sido nombrado ilegalmente.
A pesar de que Smith solicitó retirar el caso de documentos, su equipo apeló la decisión de Cannon ante el Tribunal de Apelaciones del 11.º Circuito, en Atlanta. Los fiscales consideran que aceptar la anulación de este nombramiento sentaría un precedente legal que podría complicar futuros casos de investigación independiente.