Arzobispo de Santiago de Cuba ante la Virgen de la Caridad del Cobre: “Nuestro pueblo pide libertad”

Monseñor Dionisio García Ibáñez, Arzobispo de Santiago de Cuba, pide a la Virgen de la Caridad del Cobre por el pueblo cubano. (Captura de pantalla © Arzobispado de Santiago de Cuba – Facebook)

En una emotiva celebración del Domingo de Ramos, Monseñor Dionisio García Ibáñez, Arzobispo de Santiago de Cuba, dirigió sus plegarias a la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, para pedir por el bienestar y la libertad del pueblo cubano.

Durante la Eucaristía, el religioso hizo un llamado especial para que los cubanos puedan vivir “con más desahogo, una vida normal”, expresando la esperanza de que cada individuo pueda tener su propio proyecto de vida, sin que este se vea constantemente amenazado por dificultades cotidianas.

Haciendo referencia a los desafíos que enfrenta la población, Monseñor García Ibáñez mencionó los prolongados apagones que afectan a la Isla, señalando cómo las noches se tornan largas “sin energía”. En este sentido, pidió a la Virgen que, aunque sea, les otorgue “energía interior”, pero también solicitó un “sosiego en la vida”, especialmente para que los niños, los ancianos y todos los ciudadanos puedan tener un descanso adecuado.

El Arzobispo no omitió los reclamos en las manifestaciones recientes que hicieron los santiagueros de “corriente y comida”, que es un reflejo de la realidad que enfrentan la mayoría de los ciudadanos cubanos en su día a día.

Uno de los puntos más destacados de su discurso fue cuando hizo referencia a la libertad, asegurando que “nuestro pueblo pide libertad” y que la gente anhela vivir en libertad en Cuba. Recordó a los presentes cuántas personas han abandonado el país en busca de esa libertad que no encuentran en su tierra natal.

Monseñor García Ibáñez también abordó el tema de la libertad de expresión, destacando que el pueblo cubano ha manifestado su sentir de manera pacífica, incluso en situaciones que podrían haber sido tensas. En ese sentido, recordó las palabras de los manifestantes: “no más violencia”.

El Arzobispo concluyó su intervención asegurando que hablaba en nombre del pueblo cubano y pidió a la Virgen de la Caridad del Cobre que interceda para que todos los cubanos puedan ser “uno”, respetándose mutuamente. Además, expresó su deseo de que algún día todos puedan ver la luz y encontrar soluciones a los problemas que aquejan a la sociedad cubana.

“Te pedimos madre, que todos seamos uno, que nos respetemos, que de la misma manera que estamos empezando la Semana Santa, también te pedimos padre, que algún día veamos la luz, la luz a estos problemas, que es lo elemental que se pueda pedir”, dijo el Arzobispo, que unió en oración al templo.