Azúcar y níquel, principales materias primas de Cuba, están en precios máximos en el mercado mundial

La actual crisis económica global derivada por los efectos del coronavirus ha trastocado los precios de las principales comodities en el mercado mundial. Sin embargo, para Cuba podría ser beneficioso, pues 2 de sus principales materias primas, el azúcar y el níquel, están en precios máximos nunca vistos en los pasados 3 años.

Adicionalmente otros productos que no se fabrican en Cuba y que deben ser importados como la leche en polvo, el arroz y el petróleo tienen precios mínimos. Aunque el precio del crudo muestra un incremento sostenido en la medida que la demanda se acelera por la reapertura económica de algunos países tras los rebrotes de la pandemia.

Según advierte el economista Pedro Monreal, el precio del azúcar está en 16 centavos de dólar estadounidense (USD) por libra, una tarifa no vista desde febrero de 2020 aunque fue por un breve momento, pues de inmediato cayeron los precios con la expansión de la pandemia.

En el caso del níquel está en más de 18 mil USD la tonelada, un precio que no se veía desde el 2014. Es por ello “dependiendo de los niveles de producción que se alcancen, pueden incrementarse los ingresos de divisas por estos dos rubros exportables”.

Sin embargo, la realidad al menos en la industria azucarera cubana es de un desastre total. Las aspiraciones de producir 2 millones de toneladas corren grave peligro debido a los viejos centrales que no son eficientes por falta de inversión.

Además de que no hay cultura empresarial en los dirigentes del Partido Comunista que están al frente del sector, que a pesar de contar con legendarios hombre y mujeres que atesoran siglos de saber hacer el azúcar, se han visto desmotivados por las nuevas condiciones del ordenamiento económico imperante desde el 1ero de enero.

Monreal apunta que “el arroz (segundo gasto de alimentos importados de Cuba, solamente superado por la carne de pollo) se ha hecho más barato, en tanto el precio de la leche ha bajado para volver a niveles que tuvo a inicios de 2020. En ambos casos, potencialmente se favorecen las importaciones”.

Sin embargo, otros productos de grandes volúmenes de importación por parte del gobierno cubano son el trigo, maíz y soya que “se han encarecido, dificultando recuperar la contracción de esas importaciones”.

“En el caso de la soya, que hay que importarla casi toda, y el maíz que se produce, pero que también se importa, son claves para el alimento animal”. Por lo tanto, se pronostica un descenso en la producción de carne porcina ante la dificultad de contar con alimentos importados.