Campeón olímpico Dayron Robles siembra yuca durante el coronavirus en Cuba

El campeón olímpico de las carreras de salto con vallas Dayron Robles emplea estos días de aislamiento por la pandemia de coronavirus en Cuba para sembrar yuca en una finca particular propiedad de su familia, informó la revista de deportes Play Off.

En medio del surco, con botas, sombrero y otras protecciones contra el intenso sol tropical el atleta que una vez pisó los más grandes escenarios mundiales, hoy día se dedica a la agricultura y ofrece unas palabras al citado medio mientras no deja de trabajar en la producción de alimentos, pues al país se le avecina una severa crisis económica y alimentaria.

“Es una inspiración personal, siempre quise poner el campo como parte de mi vida, poner cadenas productivas como parte de mi vida”, dijo Robles.

El atleta confesó que le “encanta hacer el sacrificio general de las cosas: labrar, plantar la semilla, echarle el agua, cuidar de esa semilla, ver su surgimiento”.

Reflexionó además que aunque “el fruto a todo el mundo el gusta”, la parte del sacrificio, puesto en cualquier ámbito de la vida es interesante.

“Porque después de que te sacrificas haciendo algo, cuando ves el resultado, creo que te sabe doble el éxito, lo disfrutas mucho más. Creo que al que le vaya a brindar un macito de lechuga, o un mango, se lo doy porque realmente conozco el sacrificio que deviene de aquella persona que trabaja el campo”, argumentó el campeón olímpico de Beijing 2008.

No es la primera vez que Robles se muestra en estas tareas agrícolas, sus seguidores de Facebook han podido ver mensajes como este: “¿Pensaron que ya habíamos terminado en el campo?!!! No, seguimos dando pelea, sembrando, recogiendo… Ojalá cuando todo esto pase podamos vernos de nuevo, para eso Quédate En Casa”.

El una vez recordista del mundo en los 110 metros con vallas comentó que “como parte del eslogan mundial de quédate en casa, nosotros también lo hemos hecho muy propio y lo llevamos bien a cabo, haciendo uso del llamado del país de que todo el que tenga un pedacito de tierra, sacarle el mayor provecho para darle al vecino al amigo, a la placita, porque lo vamos a necesitar”.

“Mi familia y yo tenemos esta posibilidad y lo hacemos con bastante frecuencia en la vida normal: estar en este sitio, tratar de implementar el huerto que aquí tenemos y darle uso a los productos que nos da la tierra”, explica.

Desde su retiro activo del deporte el nacido en Guantánamo, entabló un negocio particular en La Habana, con sus ganancias como atleta, y mantiene el restaurante La Escondida Habana y una casa de hostal que está inscrita en la plataforma Airbnb.

A los cubanos trasmitió el mensaje de cuidarse mucho ante el coronavirus

“Lo fundamental es que la gente entienda qué tan necesario es quedarse en casa, y que, para poder nosotros combatir en esa guerra, nuestro fusil es el aislamiento social, por eso exhorto a aquellas personas que aprecien su vida, y la vida de los demás, que amen y que les guste ser amados, que se queden en casa, que lo disfruten y que busquen alguna alternativa”.