Celebrar el Día de San Valentín, otro privilegio inaccesible en Cuba

Celebrar el Día de San Valentín, otro privilegio inaccesible en Cuba (LA OPCIÓN/RADIO MARTÍ).

Mientras que en otros países el 14 de febrero, Día de San Valentín o Del Amor y la Amistad en algunos países de Latinoamérica, es una fecha esperada por las parejas para celebrar su amor, en Cuba la realidad es otra muy distinta.

Ante la continua escasez de alimentos y la crisis económica que no da tregua a familias que sobreviven con un promedio de 30 dólares al mes, la idea de regalar algo especial al ser amado es una posibilidad lejana para la mayoría de los cubanos.

Más aún lo es la idea de cenar en algún restaurante como los que abundan en las zonas turísticas de la Isla, reservados precisamente para extranjeros y funcionarios que puedan costear los precios de un buen corte o algún postre exótico.

Si bien el ingenio de los habitantes de la Isla ha sabido sacarlos de varias dificultades y sortear sus carencias, en cuanto a San Valentín los ánimos no están tan altos pues ni las flores, algo que debiera ser fácil de conseguir en una isla tropical, son accesibles o están al alcance.

La incomodidad de la presión de la escasez vuelve a las personas irritables y ha desatado conflictos a últimas fechas mientras se forman filas enormes para acceder a enseres básicos como jabón y combustible.

Según reportó CubaNet, enfrentar juntos estas carencias ha fortalecido algunas relaciones, sobre todo entre parejas de más edad, cuyos matrimonios han requerido el apoyo mutuo y la comprensión al sortear todo tipo de dificultades.

Divina y Pepe relatan al citado medio que fueron novios por seis años antes de iniciar su matrimonio, que los ha mantenido unidos durante cinco décadas.

Padres y abuelos de una familia feliz, esta pareja humilde y trabajadora coincide en que el mejor regalo en el Día de San Valentín es estar junto a la persona escogida para compartir la vida.

A diferencia de ellos, las relaciones jóvenes parecen cada vez durar menos. Según algunos entrevistados por el portal informativo, el problema, no es siquiera la inestabilidad emocional y la falta de compromiso para encarar una relación seria.

Las relaciones entre las generaciones más jóvenes no suelen ser gratificantes más allá de lo físico, un atractivo que se extingue con rapidez cuando no hay otras cosas que compartir y que no es suficiente para afrontar las dificultades de una vida en común en Cuba.

Más allá de lo económico, las restricciones a la libertad también son un obstáculo para disfrutar a plenitud el día del amor en la Isla.

Aunque ya es más público a nivel social que existe la comunidad LBGT, para el gobierno siguen sin ser aceptables sus conductas y no es conveniente para las parejas homosexuales expresar públicamente su amor en Cuba.

Es así como a diferencia de otros países latinos, cuya situación económica tampoco es precisamente holgada, aun así pueden disfrutar con mayor plenitud y apertura una fecha que para los cubanos está prácticamente negada.