Chucho Valdés: biografía del pianista cubano fundador del grupo Irakere

El pianista ganó el primer premio Grammy para un grupo musical cubano. (Captura de pantalla: Chucho Valdés-YouTube)

Dionisio Jesús ‘Chucho’ Valdés Rodríguez, el renombrado pianista cubano de jazz afrocubano y fundador del legendario grupo Irakere, se ha convertido en un ícono musical no solo en su natal Quivicán, Cuba, sino a nivel global.

Desde su nacimiento el 9 de octubre de 1941, el hijo del también legendario pianista Bebo Valdés ha tenido una trayectoria musical insuperable, que lo ha llevado a ser galardonado con 12 premios Grammy, y ser reconocido como el Decano del Jazz Latino por The New York Times en 2012.

A través de su extraordinaria habilidad pianística, Chucho ha revolucionado el jazz, fusionando tradiciones afrocubanas con modernas interpretaciones jazzísticas, y dejando un imborrable legado que continúa influenciando a músicos y aficionados por igual.

La historia musical de Chucho Valdés se remonta a su infancia, donde bajo la tutela de su padre y su madre, Pilar Rodríguez, se adentró en el mundo de las melodías. A la temprana edad de tres años, Chucho ya demostraba un talento natural, tocando melodías de oído en el piano.

Su educación formal en la música comenzó a los cinco años con el profesor Oscar Muñoz Boufartique, y se perfeccionó en el Conservatorio Municipal de Música de La Habana. Chucho no tardó en explorar el jazz, formando su primer trío a los 15 años.

Su carrera profesional despegó en 1959, al debutar con la orquesta Sabor de Cuba dirigida por su padre. No obstante, fue la creación de Irakere en 1973 lo que marcó un hito en la música cubana, combinando jazz, rock, clasicismo y música tradicional cubana.

Con Irakere, Chucho ganó un Grammy en 1979, el primero para un grupo musical cubano. Su exploración musical no se detuvo ahí; en 1998, comenzó a trabajar en un nuevo formato cuarteto, y en 2009, formó Chucho Valdés y los Afro-Cuban Messengers, con quienes grabó el exitoso álbum Chucho’s Steps.

A lo largo de los años, Chucho ha compartido escenario con grandes de la música como Herbie Hancock, Chick Corea y Carlos Santana, en emblemáticos escenarios como el Carnegie Hall y el Teatro Colón de Buenos Aires. Su discografía, que cuenta con más de 88 discos y numerosas colaboraciones, refleja una vida dedicada a la música.

Chucho Valdés no solo ha sido un embajador musical, sino también un educador apasionado, impartiendo clases en el Instituto Superior de Arte de La Habana y en universidades alrededor del mundo. En 2006, fue nombrado Embajador de Buena Voluntad de la FAO ante la ONU, mostrando su compromiso con causas humanitarias.

Sus contribuciones al mundo musical han sido reconocidas globalmente, recibiendo numerosas distinciones como la Orden Félix Varela de primer grado en Cuba y Doctor Honoris Causa de varios institutos de prestigio. Además, Chucho ha sido honrado con las llaves de varias ciudades en reconocimiento a su impacto cultural.

Con cada nota que toca, Chucho Valdés sigue siendo un testimonio viviente del riquísimo repertorio musical de Cuba, y su influencia perdura, resonando a través de las generaciones y las fronteras geográficas, uniendo al mundo a través de la universalidad de la música.