«Cómo no va a temblar en Oriente con ese inglés»: Ulises Toirac sobre el discurso de Díaz-Canel

El humorista cubano Ulises Toirac ha reaccionado ante el viral video del mandatario cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez, donde este intenta leer un papel con un terrible dominio de la lengua de Shakespeare, asegurando que «Cómo no va a temblar en Oriente con ese inglés».

Precisamente el post del conocido por su papel de «Chivichana» lo realiza en la jornada en la que fueron detectados varios sismos en dicha geografía de la Mayor de las Antillas, hecho que aprovechó para burlarse de las pocas habilidades lingüísticas y también, de la poca vergüenza del presidente.

Sin dudas el tema del día en las redes sociales han sido los «papelazos» del puesto a dedo durante su visita oficial a San Vicente y las Granadinas, en primer lugar por la incapacidad de decir correctamente dos oraciones en inglés y luego, por el video divulgado donde intenta cantar La Guantanamera.

En el primero de los casos, diversos cibernautas lo han comparado con la profesora que hace unos meses se hizo popular al «chapurrear» una presentación como docente de ese idioma, que al igual que esposo de la ‘Machi’ demostró su incompetencia.

Los comentarios en el post del artista antillano, quien se ha distinguido por sus certeras críticas a la realidad que vive el país, colocando su característico sentido del humor, coinciden en la observación de que la presidencia cubana posee dos tesoros: El presidente y la «no primera dama», ofrecen escenas más risibles que cualquier película del género.

«Eres tremendo, ya no tengo miedo a viajar, después de recibir esa demostración de inglés creo que hasta yo que no sé nada puedo entablar una conversación»; «Cuando tira una supera la anterior»; «En constante superación. Dando contenido infinito a los memeros», refieren los usuarios en la publicación.

Por otro lado, numerosas personas se muestran indignadas con el segundo audiovisual, durante el cual Díaz-Canel hace un dúo con el ministro Rodrigo Malmierca, al desentonar juntos la emblemática pieza de Joseíto Fernández.

Con la «gozadera» en su punto, los aplausos y risas del circo que acompaña a la cúpula, el inspirado mandatario soltó el galillo para intentar sostener las notas altas, cosa que jamás logró y, por el contrario, ha originado un sinfín de burlas y chistes.

«A él que le importa si después, terminó de fiesta cantando la Guantanamera, mientras aquí el pueblo de cola en cola a ver si logra comprar el dichoso módulo de diciembre», apuntó la cibernauta identificada como Rebeca Valdés.