¿Cómo son las cubanas?

Tienen un atractivo especial… (Foto: Periódico Cubano)

Para continuar con el tema de que la mayor riqueza cubana es su gente, vamos a enfocarnos esta vez en cómo son las mujeres cubanas.

Belleza y sensualidad

Las mujeres cubanas son mundialmente reconocidas por su belleza y gran poder de atracción. Gracias a la combinación de distintas raíces y el fuego caribeño, tienen un atractivo especial.

También piropean

Las mujeres cubanas también poseen el arte de «piropear». No solo es que les guste ser piropeadas, sino que como los hombres, pero en menor medida, ellas manifiestan la jocosidad y desenfado que caracterizan a los cubanos de manera general. A los hombres cubanos les encanta ser piropeados por ellas. Algunos tipos de piropos típicos cubanos para los hombres:

• “Papi estás como el morro, viejo pero interesante”
• “Estás como el ron, mientras más añejo, mejor”
• «Caballero, ¿pero de qué mata se cayó ese mango?

Estilo de caminar

Caminan como si fueran «cisnes orgullosos, siempre altivos, esponjando su lustroso plumazón de nívea seda…» (Foto: Periódico Cubano)

Las mujeres cubanas tienen una forma de caminar muy peculiar. Y es que lo hacen como si fueran «cisnes orgullosos, siempre altivos, esponjando su lustroso plumazón de nívea seda…» (Sensaciones de Luis Rosado Vega).

El caminar de una cubana es único e incomparable, es uno de los rasgos que la delata en el extranjero. Por eso, al salir a la calle, inconscientemente se convierte en una talentosa actriz de Hollywood caminando por la alfombra roja. Cada movimiento suyo irradia sensualidad, arrebatando más de una mirada a su paso. Y es imposible aprender a caminar así, porque es algo innato, ellas nacen con ese don.

Alegría y optimismo

La mujer cubana es alegre, optimista, valiente y luchadora. A pesar de las dificultades económicas y eternas preguntas: “qué cocino hoy”, o mejor dicho, “con qué cocino hoy para mi familia”, “cómo compro los juguetes que me pide mi hijo si cuestan mi salario del mes”; la mujer cubana no carece de su acogedora y generosa sonrisa. Es positiva y puede hacer maravillas con su ingenio y creatividad.

Trabajadora

Siempre tiene en la mente que debe ser fuerte y seguir luchando por su familia. Las cubanas no le tienen miedo al trabajo, por muy duro que sea. Son emprendedoras y logran ser polifacéticas tanto en el hogar como en el trabajo.

Mano para la cocina

Ella no mira recetas en Internet, lo hace intuitivamente. (Foto: Periódico Cubano)

El arte culinario se hereda generación tras generación. A la mayoría de las mujeres cubanas les encanta cocinar, lo hacen muy bien y con destreza. Los famosos frijoles negros tan amados por los cubanos y hechos por una mujer cubana no tienen comparación. Ella no mira recetas en Internet, lo hace intuitivamente, con la cantidad de especias necesarias para que tenga ese típico y auténtico sabor cubano.

Baila como una Diosa

No es secreto que las caribeñas lo llevan en la sangre. Tal parece que las cubanas nacen moviendo las caderas, primero aprenden a bailar y luego a caminar. Y es que sus movimientos son muy naturales. Crecen con los ritmos. Los hacen parte de ellas y terminan convirtiéndose en las mejores bailarinas.

Carácter

Suele decirse que del amor al odio hay un solo paso. Así es la mujer cubana, ardiente y apasionada. Puede amar locamente, pero en cuestión de segundos puede convertirse en una fiera. Posee una mezcla de dulzura y pasividad, y de repente puede convertirse en una verdadera rebelde, dominante y escandalosa.

Son buenas madres

Eso sí, igual que los hombres cubanos, las mujeres son muy buenas madres, biológicas o de crianza. Dedican su tiempo a la crianza de sus hijos, se sacrifican si hace falta, se esmeran en darles lo mejor a sus seres queridos y en demostrarles su amor incondicional. Hasta pueden convertirse en leonas si alguien hace sufrir a uno de sus hijos.

Son muy familiares

Las cubanas tienen mucho apego a la familia y las buenas amistades. Las familias cubanas son muy grandes y unidas. En las fiestas se reúnen los primos, tíos, primos-sobrinos, primos de los tíos, etc. Al emigrar al extranjero no se olvidan de sus parientes, así sean los más lejanos, y siguen manteniendo contacto con ellos, aunque sea a distancia.

La inteligencia les caracteriza

Caminan como si fueran «cisnes orgullosos, siempre altivos, esponjando su lustroso plumazón de nívea seda…» (Foto: Periódico Cubano)

Saben iniciar y mantener una buena conversación. Les gusta leer y estar informadas. Les gusta aprender cosas nuevas y son buenas estudiantes. La mujer cubana también posee una gran inteligencia emocional, saben actuar ante difíciles situaciones de la vida y tienen un gran poder de intuición.

Antes muerta que sencilla

Eso sí, al igual que los hombres cubanos, las mujeres siempre presumen de estar bien arregladas. Uñas bien arregladas, maquillaje y perfume no pueden faltar. Tienen buen gusto por la ropa, y siempre tratan de estar acorde a las últimas tendencias, ajustándose a la posibilidad de cada cual, pero al menos informadas de lo que se lleva.

Celosas

La cubana te sonreirá si la felicitas por una buena elección, más si le celebras a su pareja, les gusta ostentar del hombre que tienen a su lado, pero con mucha cautela. Se dice que en términos de relaciones amorosas, las cubanas duermen con un ojo cerrado y el otro abierto. Son seguras de sí, y lo demuestran, pero en el fondo son verdaderas centinelas que no dejan pasar una si el amante les interesa realmente.

Son diversos los rasgos que poseen las mujeres cubanas, pero a todas las une su humildad, alegría, amabilidad y belleza natural, tanto física como interior.

Artículo de opinión publicado bajo la Política de Renuncia de Responsabilidad de Periódico Cubano