Cónsul de Rusia reconoce la crítica situación de sus turistas varados en Cuba por COVID-19

La Cónsul General de Rusia en Cuba, Nana Mgeladze, reconoció la situación por la que están atravesando varios turistas rusos que se encuentran aislados luego de haber sido diagnosticados con COVID-19 al llegar a la Isla.

La funcionaria respondió durante una entrevista con la agencia de noticias RIA Novosti, que hasta la fecha el Ministerio de Salud Pública de Cuba ha reportado a 34 ciudadanos rusos que han dado positivo a la enfermedad y que se encuentran aislados en el país caribeño.

Indicó que los turistas son confinados de acuerdo al protocolo establecido por el Gobierno cubano.

“Hasta la fecha, el Ministerio de Salud cubano nos ha informado que un total de 34 rusos han sido diagnosticados con coronavirus. Luego de la reanudación del tráfico aéreo entre los países, interrumpido por la pandemia, ya llegaron tres aviones de Moscú a la Isla turística cubana de Cayo Coco. De acuerdo con los protocolos epidemiológicos cubanos, todos los rusos infectados fueron trasladados a hospitales de las ciudades de Santa Clara y Ciego de Ávila”, declaró Mgeladze.

Tras arribar a la Isla y ser internados en los centros de aislamiento, los extranjeros se pusieron en contacto con su gobierno y los medios de prensa mediante sus redes sociales para exponer las irregularidades a las que son sometidos, asegurando que se sienten como rehenes.

Varios turistas que llegaron y dieron positivo al COVID-19 en los controles de entrada a Cuba, sin embargo algunos aseguran que no se les mostró los resultados de las pruebas PCR.

“Al llegar justo al aeropuerto y por alguna razón en el baño nos hicieron pruebas. Nos llevaron al hotel, y un día después leyeron las listas de los infectados y los llevaron a otro hotel. Yo estaba entre los infectados. Preguntamos para que nos mostraran los resultados de la investigación, pero nos rechazaron”, explicó Sergei Ivanov, director de una agencia de viajes de Moscú que arribó a la Isla como parte de un tour publicitario.

El ruso, quien compartió su experiencia mediante un artículo titulado “¡Sácanos de Cuba!” y escrito al medio ruso Rossiyskaya Gazeta, indicó que las autoridades castristas les hicieron firmar papeles donde concedían consentimiento para tratamiento, entre ellas operaciones quirúrgicas.