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Cubana solicita ayuda en Facebook ante la falta de ataúd para su madre fallecida en Holguín
El gobierno cubano no garantiza suficientes cajas fúnebres a la ciudadanía
Una petición en redes sociales sorprendió a los cubanos y también evidenció que el régimen comunista no muestra interés por garantizar un trato digno a las personas fallecidas en la Isla.
Una cubana, identificada como Rosy Rodríguez en Facebook, escribió en el grupo ‘Revolico Holguín Compra y Ventas’ que necesitaba comprar una caja fúnebre para su madre, quien murió ayer domingo.
Ante comentarios de usuarios que veían el post como una broma, la mujer respondió: “ustedes creen que yo pudiera jugar con eso. Si quieren les doy mi dirección para que vayan a ver su cuerpo allí tendido porque ni carro fúnebre hay para ella. Al que no vaya a aportar algo positivo o ayudar a resolverme el problema, limítese a comentar. No jugaría con algo tan sagrado. Respeten mi dolor”.
Finalmente, Rodríguez volvió a publicar que logró conseguir la caja y también el transporte para el traslado del cuerpo. En imágenes que compartió se ve un ataúd color azul y también un jeep adaptado a la parte trasera de un carro fúnebre.
La publicación de esta mujer motivó a otras personas a relatar las dificultades que han enfrentado para encontrar un ataúd, un objeto que en otros países se consigue sin problemas y de buen material.
«Estoy seguro de que esto es verdad. Tampoco hay carros fúnebres, mi abuela falleció y ese día no había nadie en el cementerio para enterrarla. Hubo que esperar que el gobierno mandara a buscar enterradores. Esto es terrible», manifestó una usuaria.
Otro cibernauta contó que su padre murió en Holguín en noviembre pasado y lo tuvieron vestido en la cama, a la espera de la caja desde las 6:00 a.m. «A las 5:00 p.m., me hizo el favor un carro de Cacocin que entró al hospital de llevar una caja y la de la funeraria me dijo que el entierro era al otro día a las 10:00 a.m. La mala noticia era que no me aseguraban que hubiera carro para el entierro. Tuvimos que tomar la determinación de enterrarlo a esa hora, me mandaron una caja y para el cementerio Luz y Caballero. Al llegar allí no había tablas, tuve que ir en medio del dolor y la indignación a cortar las barras de una cama», refirió.
Un cubano agregó en los comentarios que su familia estuvo esperando un ataúd para un ser querido fallecido y tanto la caja, como el carro, aparecieron 12 horas después de la solicitud.