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Cubanos piden el fin del Servicio Militar obligatorio y hacen viral una nueva etiqueta en redes sociales
«Solo tiene 11 años y desde ya me aterra la posibilidad de que en unos pocos años pueda ser llamado al Servicio Militar Activo/Obligatorio», refiere una madre cubana
Jóvenes desaparecidos en el incendio de Matanzas, la mayoría tenían entre 18 y 24 años de edad (Foto: collage Carlos Macias Lopez, Leo Alejandro Doval, Elizabeth Leyva- Facebook)
Miles de cubanos están pidiendo hacer viral una nueva etiqueta en redes sociales, en la que piden que cese el Servicio Militar Activo en la Isla, tras los lamentables fallecimientos, aún por confirmar, de varios reclutas en el reciente incendio ocurrido en Matanzas.
Aunque los medios oficialistas todavía no reconocen el deceso de los jóvenes, sus familiares ya lloran la desaparición de, al menos, unos 14 muchachos pertenecientes a las brigadas de bomberos que intentaron sofocar las llamas en los supertanqueros matanceros.
La etiqueta #NoAlServicioMilitarObligatorio se ha posicionado entre las más virales de las últimas horas, como demanda para que la dictadura deje de enviar a chicos, de manera obligatoria, a formar parte de las filas militares del país a partir de los 18 años.
Solo tiene 11 y desde ya me aterra la posibilidad de que en unos pocos años pueda ser llamado al Servicio Militar Activo/Obligatorio.
Como madre cubana digo #NoAlServicioMilitarObligatorio pic.twitter.com/kVHuWDDuas— Arlene (@otrasulfatada) August 10, 2022
“No solamente porque la vida de un joven peligra en mano de militares… También en ese tiempo se pierden las energías más valiosas y se posponen sueños y deseos que corren igual riesgo de perderse para siempre. #NoAlServicioMilitarObligatorio en Cuba”, fueron las palabras del artista plástico Julio Llópiz Casal.
Por su parte, el activista Magdiel Jorge Castro, denunciaba, “Basta ya de niños convertidos en mártires”, mientras Leo Fernández Otaño exige: “Ni una sonrisa más truncada. Ni una familia cubana más fracturada. Ni un proyecto vital más incinerado”.
Uno de los usuarios de Twitter más activo, conocido como “@un poeta ahí” escribió: “No quiero ni puedo imaginar el dolor de los familiares de las víctimas. Sobre todo, de esas que solo pasaban el Servicio Militar obligatorio, y que fueron allí, por la orden de otros, a morir. Ellos ni eran bomberos ni son mártires ahora: son víctimas”, aseguró.
#NoAlServicioMilitarObligatorio #AbajoLaDictadura #CubaEsUnEstadoFallido https://t.co/Ksbg2Ig43s
— Pez_Flaco ?? (@pez_flaco) August 10, 2022
Así mismo, el profesor Roberto Garcés Marrero estableció que “la idea de la necesidad del SMO es la misma que inspiró a las UMAP: (de) formar jóvenes en función de una ideología militarista sometiéndolos a condiciones inhumanas. #NoAlServicioMilitarObligatorioEnCuba. ¿Cuántos han muerto en el Servicio? ¿Quién asume esa responsabilidad?”, se preguntó el catedrático.
#NoAlServicioMilitarObligatorio en #Cuba https://t.co/817onqks29
— Luz Escobar (@Luz_Cuba) August 11, 2022
Adiel González Maimo, activista de la plataforma LGBTIQ+, aseveró que “El SMO es un error. Una vez más queda demostrado. No quiero ni recordar los horrores que se viven en esas unidades porque historias sobran (ni hablar de la flagrante homo/transfobia que se sufre en las FAR/MININT)”.
Quizás, la última gran “masacre” de este tipo había ocurrido en 1962, cuando el gobierno castrista envió a miles de jóvenes reclutados en el Servicio Militar, a luchar por la “liberación de Argelia”. En los 15 años de duración de la operación Carlota participaron 300 mil soldados y 50 mil colaboradores civiles cubanos.
Según cifras ofrecidas por la dictadura, de ellos al menos 2.077 murieron, pero esos datos han sido más que cuestionados por muchos historiadores.
A esto hay que sumarle que, aunque la prensa oficialista nunca mencione esos casos, constantemente se conoce de manera informal, de jóvenes que han fallecido debido a una explosión de mina en los campos de entrenamiento, o con un disparo de un fusil o, simplemente, suicidado ante la impotencia y el desespero de estar durante un año jugando a ser el militar que nunca eligieron ser.
Justamente, en horas del jueves 11 de agosto, el régimen hacía público el nombre de otra víctima fatal en el incendio de Matanzas. Se trata del bombero Elier Correa, que se encontraba en estado crítico “con quemaduras incompatibles con la vida”.
Leo Alejandro Doval, Adriano Rodríguez y Fabián Naranjo, figuran también entre la lista de desaparecidos y sus familiares aseguran que no están vivos.
