Da su testimonio el migrante cubano secuestrado con su familia por un cartel de México

Damián Terry estuvo dos meses secuestrado junto a su esposa, suegra e hijo por un cartel mexicano. (Foto: Captura de pantalla)

Damián Terry es el nombre del joven migrante cubano que fue secuestrado con su familia, durante dos meses, por un cartel de México y luego de alcanzar la libertad en los Estados Unidos, ha ofrecido su testimonio de la terrible experiencia.

En una entrevista concedida al periodista Rolando Nápoles, del canal 41 de Miami, reveló que “Nosotros fuimos la única familia que se quedó durante dos meses conviviendo bajo las órdenes del cartel y del secuestro a que nos tenían sometidos, sin teléfonos y sin ningún tipo de comunicación con el exterior. Nuestra familia nos daba por desaparecidos y por muertos. Mi madre me dio por muerto durante dos meses».

Asimismo, rememoró los terribles momentos que tuvo que vivir junto a su esposa, su suegra y su hijo de 7 años de edad durante los cuales la organización criminal los amenazaba con pistolas y fusiles AK-47, para que pagaran el rescate, ascendente a 20 mil dólares confesó a América TeVé.

De acuerdo a su declaración, no contaban con esa gran suma de dinero, ni con familiares que lo pudieran enviar desde EEUU. Al respecto dijo que fueron «secuestrados en el desierto, donde estuvimos 19 días. Ahí amenazaban constantemente con quitarnos la vida, si nuestros familiares o algún coyote no pagaba el piso como le llaman ellos, para poder pasar por territorio del cartel… estaban pidiendo demasiado dinero por nuestras vidas y nuestra libertad”.

Una historia de «terror» pero que le sucede a muchos migrantes cubanos

Damián Terry, quien decidió no identificar al cartel que mantuvo cautiva a su familia ni dar su dirección actual por temor a represalias, asegura que no sabe el motivo por el que finalmente fueron liberados, pero que supone que haya sido gracias a que el jefe del cartel le tomó «cariño» al niño.

Imagina que «Por el niño mío empezaron a coger algún tipo de afinidad, y al verlo tanto tiempo confinado al secuestro, no sé qué fue lo que pasó, si el corazón de ellos se remordió por mi hijo, que después de dos meses nos entregan frente al muro fronterizo», explicó.

Sin embargo, la tragedia para este cubano no acabó con la libertad. Antes de conseguir ingresar definitivamente a tierra estadounidense, fue regresado en tres ocasiones a territorio mexicano por la ley conocida como Título 42, a pesar de haber mostrado a los agentes de migración las evidencias del secuestro y de su temor sobre Cuba, donde era considerado opositor del régimen.

Según apuntó al medio antes citado, en la actualidad en su estatus migratorio realiza el proceso de asilo político y además aprovechó para enviar un mensaje a sus coterráneos sobre los riesgos del trayecto por tierra azteca principalmente.

“No se tiren a la suerte, porque muchos cubanos están engañados y no saben cómo funciona la política en ambos países”, dijo el migrante, quien puntualizó que “Muchos quieren salir desaforadamente, porque es verdad que vivimos una dictadura de más de 60 años, pero salen sin conocimiento de los peligros para su vida que pueden enfrentar”.