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Desmienten a Díaz-Canel: la falta de inversiones en el sector eléctrico es una decisión política
El mandatario comunista había explicado que los apagones en la Isla se debían a la falta de inversiones por culpa del bloqueo
Los continuos apagones en Cuba se deben a la crítica situación del sector energético, que según el mandatario Miguel Díaz-Canel carece de inversiones por las difíciles condiciones que atraviesa el país y que son consecuencias del “bloqueo de EEUU”.
Las declaraciones del primer secretario del Partido Comunista se produjeron durante una intervención especial radio televisada para intentar calmar a la población con explicaciones y justificaciones. El gobierno sabe que un próximo 11 de julio con una protesta popular masiva está a la vuelta de la esquina.
Sin embargo, las incongruencias y mentiras de los gobernantes ya no pasan por alto en un mundo interconectado con acceso a Internet. Según el economista cubano Pedro Monreal, puede que Cuba efectivamente tenga grandes problemas de liquidez, pero la decisión de a qué sector dedicar los recursos e invertir es en esencia un tema de política pública.
Los únicos políticos que han ostentado el poder en Cuba por los últimos 63 años son los comunistas, especialmente Díaz-Canel, quien asumió como sucesor de Raúl Castro en 2018.
Desde ese año se ha acentuado la brecha entre el dinero que se dedica a las inversiones en el sector eléctrico del país y aquellas destinadas a la construcción de más hoteles, administrados por GAESA bajo el mando de los militares cubanos.
Monreal construyó una gráfica con datos oficiales de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información donde se aprecia como en el suministro de gas, agua y electricidad se invierte menos del 10% del presupuesto estatal y para la construcción de hoteles se alcanzó un pico de 45.6% en el 2020.
Para el economista cubano, “la falta de recursos influye en la inversión, pero un cambio sostenido del peso relativo de sectores indica una decisión política”.
El gobierno cubano se ha empeñado en “priorizar recursos disponibles a favor de actividad inmobiliaria (que incluye turismo) en detrimento de servicios básicos (electricidad, gas y agua)”.
Durante su intervención, Díaz-Canel no ofreció soluciones y solo pareció preocupado por dar justificaciones para evitar otra revuelta popular. Como carece de la legitimidad que en cierto modo tienen los que estuvieron desde el primer día en la Sierra Maestra durante el proceso que culminó en 1959, el ingeniero electrónico se hizo acompañar de Ramiro Valdés Menéndez.
El veterano de 90 años pidió más sacrificio a la población para vencer estos momentos difíciles. “Nuestro pueblo es eminentemente revolucionario, con capacidad de sacrificio y voluntad de hacer”, expresó al incentivar el ahorro de energía en los hogares y centros de trabajo.
“Hemos trabajado en la oferta, pero también debemos cuidar la demanda, un tema que hemos estado revisando en los consejos energéticos provinciales”, concluyó.