Díaz-Canel aclara que Lis Cuesta no es primera dama: “Es una esposa que trabaja”

El presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez le bajó el “título” a Lis Cuesta, pues recordó ella no es la primera dama de Cuba, sino “una esposa que trabaja”.

La aclaración ocurrió durante la visita oficial a la Isla de su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador. El también primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), se saltó el protocolo tras una alocución del vocero del régimen, Froilán Arencibia, en el Palacio de la Revolución, para intentar desligar a su esposa de la política del país.

“Una aclaración. Ni en México ni en Cuba tenemos primeras damas. Ellas son las esposas, que trabajan en sus trabajos, y de paso hacen sus presentaciones con nosotros…”, afirmó, para de inmediato ser aplaudido por los presentes, entre ellos, López Obrador.

Al parecer, a la dictadura no le gusta la imagen que Lis Cuesta está generando y, desde las sombras, han pedido al presidente hacer la “oportuna aclaración”. Tras varios años en el poder, Díaz-Canel intenta desligar a su esposa del cargo de primera dama, un “error” que por alguna razón dejaron correr y ahora desean parar en seco.

Y así fue como Díaz Canel regañó a Froilán Arencibia por decirla Primera Dama a Lis Cuesta? pic.twitter.com/uD8bxo0gTJ

— Mag Jorge Castro?? (@mjorgec1994) May 8, 2022

Sin embargo, para la mayoría de los cubanos no hay problema. “Yo honestamente el concepto de primera dama no lo entiendo: es la esposa o esposo del presidente, pero no tiene ningún puesto, ninguna influencia, ni ninguna obligación, no deber, debería seguir con su vida. En este caso ni el marido es electo, así que menos protagonismo para ella”, escribió una usuaria en Twitter.

Muchos internautas catalogaron el proceder de Díaz-Canel como “ridículo”. “Aclaración hubiese sido cuando vinieron los reyes de España, o el año pasado en México, o cuando fueron a Nueva York. Ridículo es avergonzar a un periodista en TV nacional”.

Para el reportero Alfredo Ballesteros, lo que hizo el mandatario fue “antiético”. “¿No pudo hacer la corrección, tiempo atrás y, en privado? Que ridículo le quedó eso, abochornar a alguien así. El disparate de Arencibia fue menos que ‘el limón es la base de todo’ que sí dijo el presidente y no lo corrigió”.

“A la gente se respeta, no se abochorna para anotarte patas; ese exceso de modestia es tan falso, como falsos los aplausos de los presentes por la honestidad del jefe”, indicó. “¿Cuándo Lis Cuesta viaja al extranjero, que lo hace siempre, en calidad de qué lo hace? Una duda. Creo que ya no lo haga más. La esposa de Fidel Castro, nunca lo hizo, ¿o sí?”.

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