Disidente cubana denuncia violación a los derechos humanos de sus hijos presos

Miranda Martín Calderín, coordinadora de la célula Los Maceo de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), denunció en las redes sociales la violación a los derechos humanos de sus hijos, Vianco y Diango Vargas, que se encuentran en prisión y a quienes le negaron todo tipo de comunicación con su madre durante el último año. 

“Soy madre del preso político Vianco Vargas Martín y del preso disidente Diango Vargas Martín, que se encuentran en la Unidad de la Prisión de Boniato, cumpliendo 15 y 20 años, respectivamente, de privación de su libertad”, dijo en un video subido a Facebook.

Martín Calderín que al llegar a la visita reglamentaria de sus dos hijos, el día 29 de julio, el jefe de la unidad solicita hablar con ella, solo para confirmarle que por un año no podía volver a entrar a la prisión de Boniato ni tener ningún tipo de comunicación con sus hijos.

“Es decir que tenía restringida la visita por un año con mis hijos Viango y Diango (…) Hace varios días que no tengo ninguna comunicación con mis hijos, no sé lo que está pasando con ellos dentro de la prisión”, dijo.

También hace constar que, cuando salió de dicha oficina, ya se encontraba una patrulla esperándola para detenerla junto con su hijo Alexey Vargas Martín, y su hijastra Nery Leidy Vargas Pérez. 

“Nos trasladamos a la unidad policial conocida como La Tercera, en Santiago de Cuba, donde estuvimos durante ocho horas detenidos”. 

Además, señaló Miranda Martín, cuando salieron de la detención, el agente Ricardo de la Policía Política les informó que sus pertenencias se encontraban en la Unidad de Enfrentamiento y que era ahí donde debían recuperarlas. 

Ya en ese lugar, un agente conocido como Fran, al intentar recoger sus bolsos y carteras, golpeó de forma violenta a Miranda Martín, quien perdió el conocimiento y tuvo que ser traslada  al Hospital Clínico Quirúrgico, en Santiago de Cuba. 

“Realmente temo mucho por la vida de mis hijos, temo, porque realmente estoy consciente de que estamos luchando contra esbirros que se comportan como sicarios y se muy bien de lo que son capaces, de cualquier cosa con tal de cumplir su objetivo”, indica

“Sí, temo mucho por su vida, pero realmente me considero una mujer valiente y la valentía consiste, precisamente en saber sobreponerse al miedo y eso es precisamente lo que yo hago, sobrepongo mis temores, aunque estoy consciente de lo que son capaces de hacer y ratifico una vez más mi firmeza aquí dentro de la organización”. 

Finalmente, envía un mensaje al Gobierno de Miguel Díaz-Canel:

“No me voy a apartar de la lucha; decidí un día en el año 2012 incorporarme a la organización, a la Unión Patriótica de Cuba y formar parte de esta lucha pacífica que no acabará hasta no ver a Cuba libre. Vuelvo y ratifico mi firmeza y que conste y quede muy claro, no son palabras lo que estoy utilizando, con hechos voy a demostrar que me mantengo firme en la Unión Patriótica de Cuba”.