El oscuro historial de Omar Rafael García Lazo, diplomático cubano expulsado de Colombia

Omar Rafael García Lazo (Foto: Omar Rafael García Lazo-Facebook)

La Cancillería de Colombia, en nombre del Gobierno Nacional del país neogranadino, informó este viernes que tomó la decisión de declarar persona non grata a un funcionario de la embajada de Cuba acreditado en Colombia.

Este funcionario, llamado Omar Rafael García Lazo, es un personaje conocido y a la vez repudiado por muchos cubanos, pero que quizás la mayoría no recuerdan. Repasemos su historial.

García Lazo es un egresado de la Facultad de Comunicación (FCOM) de la Universidad de La Habana, quien además posee un Magíster en Relaciones Internacionales en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Raúl Roa García” de La Habana.

Omar se desempeñó además como profesor de FCOM entre los años 2005-2009 y fue miembro del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido Comunista de Cuba entre los años 2007 y 2017.

No obstante, saltó a la palestra pública en noviembre del pasado año luego de arremeter contra los activistas del Movimiento San Isidro, que estuvieron casi 10 días en huelga de hambre como protesta por la arbitraria encarcelación del rapero Denis Solís.

Su «artículo» titulado «Lecciones de San Isidro», y entrecomillamos «artículo» porque se trató de un burdo listado con frases incoherentes que destilaban odio. Pretendían ser una defensa descarada hacia toda la represión policial que sufrieron los activistas cubanos.

El mismo fue publicado en el medio oficialista Cubadebate, lo cual desató la ira de los cubanos en las redes sociales.

Adulterio y delaciones

Pocas semanas después, el nombre de Omar Rafael García Lazo fue protagonista de otro escándalo, al estar inmerso en una trama de adulterio que involucró a otro diplomático y una periodista de la agencia Prensa Latina.

Según reportes en ese momento del portal Cubanos por el Mundo, Omar Rafael mantuvo una relación extramatrimonial con Claudia Ojeda, esposa de Abel Ernesto Derivet Vidal, ex segundo secretario de la embajada cubana en México.

García Lazo y Claudia, periodista de Prensa Latina, se conocieron en Bogotá.

En aquel entonces, ella estaba casada con un ciudadano colombiano y él también tenía su esposa. Tras regresar a la Isla, la reportera rompió su previa unión y se comprometió con Derivet Vidal, pero no dejó de relacionarse sentimentalmente con Omar Rafael.

Igualmente, Omar Rafael es conocido desde años atrás en sus tiempos como estudiante universitario, cuando mostró dotes del oportunista y delator que siempre fue.

En ese entonces fue capaz de “echar para adelante” a su propia novia de aquel entonces, quien tenía un alto cargo de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), así como a otros amigos del aula con el fin de ascender políticamente.

Regresando al presente

Aunque no se precisa el año exacto en que fue destinado a la Embajada de Cuba en Colombia, por reportes del Minrex debe haber sido entre 2017 y 2018. Desde entonces, García Lazo ha actuado como una suerte de portavoz diplomático: dando charlas en universidades, reuniéndose con sindicatos o publicando en medios locales.

Revela el medio colombiano El Tiempo que el diplomático aparece como cabeza de un grupo identificado como «Movimiento colombiano de solidaridad con Cuba».

La Cancillería de Colombia tan solo dijo que «estaba desarrollando en el país actividades incompatibles con lo previsto en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas». Pero no especificó que actividades.

Lo que sí pudo saber el medio del país cafetero es que la expulsión de Omar Rafael estaba prevista cuatro meses atrás, una decisión que se iba a tomar en diciembre, cuando se expulsaron a dos funcionarios de la embajada rusa por espionaje, pero se aplazó.

En ese momento se verificaban supuestas operaciones de influencia, a través de cadenas de difusión mediante grupos de WhatsApp.

Además, se evaluaban conversatorios y foros, e impulso a tendencias en redes sociales, en torno a movilización de masas.

Las relaciones entre Colombia y Cuba han estado tensas desde hace varios meses, cuando la isla dio a conocer datos sobre un supuesto atentado terrorista del Ejército de Liberación Nacional (ELN), una maniobra que parecía contener tintes propagandísticos para evitar la inclusión una vez más del régimen en la lista de países «Patrocinadores del Terrorismo».

En un par de tensas reuniones, Cuba se abstuvo de entregar datos adicionales sobre la información que le llegó. «De hecho, el ELN dijo que la inteligencia de la isla, una de las más reconocidas a nivel mundial, había sido asaltada en su buena fe», señaló el diario El Tiempo.

Omar, quien no parece ser más que un oportunista que vocifera la retórica comunista, pero gusta de los placeres de la vida en el extranjero como miembro de las delegaciones diplomáticas, no podrá volver a poner un pie en Colombia.

Por el momento, le tocará defender su «Revolución» desde la propia isla, en la trinchera de la escasez, las colas, y la crisis alimentaria.