Feminicidios en Cuba: más que cifras, mujeres sin vida

Hasta la fecha, el estado cubano ha hecho nada para evitar la creciente ola de crímenes que afecta a las féminas antillanas. (Foto: Periódico Cubano)

La creciente ola de asesinatos de mujeres en Cuba ha hecho sonar todas las alarmas sobre la violencia que viven las féminas en la Mayor de las Antillas.

Con la muerte el pasado 10 de marzo de Elaidy Alonso Arboláez, la lista de cubanas ultimadas ascendió a 18, número realmente alarmante si se tiene en cuenta que han pasado solo tres meses desde que inició el año.

A pesar de que muchas de estas víctimas ya habían advertido a las autoridades que sufrían acoso y violencia doméstica, nadie les prestó atención a sus denuncias y terminaron perdiendo la vida a manos de hombres, en crímenes relacionados con la violencia de género.

Lo más alarmante es que, tan solo hasta la fecha, ya se han registrado más de la mitad de feminicidios reportados en el 2022, por lo cual se augura que estos 12 meses terminarán con una lista mayor.

Estos serían solo un sub registro hecho por la prensa y observatorios independientes, pues no se conoce a ciencia cierta cuántas mujeres han muerto en la Isla debido a que el Gobierno no se preocupa por establecer canales y herramientas que proporcionen estos datos.

¿Cuáles son los tipos de feminicidios?

Se define como feminicidio al asesinato de una mujer por cuestiones asociadas a su género, por lo que, cuando una fémina es ultimada por un hombre con quien mantuvo una relación, o cuando es abusada sexualmente y luego asesinada, incluso cuando muere a manos de alguien que la acosaba, se puede decir que se trata de un crimen de este tipo.

Sin embargo, dentro de la propia definición existen varias categorías, las cuales también han acontecido este año en Cuba, según relata el Observatorio de Género de la revista Alas Tensas. Entre ellas clasifican:

1. Feminicidio en la pareja o expareja: Asesinato de una mujer por su pareja o expareja.
2. Feminicidio familiar: Asesinato de una mujer por hombres de su entorno familiar.
3. Feminicidio sexual: Asesinato de una mujer sin relación de pareja ni familiar con el victimario; resultado de la violencia sexual.
4. Feminicidio social: Asesinato de una mujer por una agresión, de carácter no sexual, por parte de un hombre con el que no mantenía una relación de pareja ni familiar (un desconocido, un compañero de trabajo, un vecino, un amigo, empleador, etc.).
5. Feminicidio vicario: Asesinato de los hijos/as menores de edad de una mujer, por parte de un hombre que emplea la violencia como instrumento para causar perjuicio o daño a su objetivo inicial.

Del mismo modo, se incluyen aquellos relacionados con la explotación sexual, la trata o prostitución, y la mutilación genital femenina o matrimonio forzado.

Gracias a las denuncias hechas en redes sociales, se ha conocido que en Cuba el feminicidio en la pareja o expareja es el más común, con un total de 37 víctimas desde el pasado año hasta la fecha. Lo siguen el sexual, con cinco muertes, y el social, con igual número de fallecidas.

Por su parte, las provincias con mayor número de mujeres ultimadas son La Habana, Sancti Spíritus, Camagüey, Holguín y Matanzas.

¿Dónde, quién y cómo las asesinan?

Datos aportados por Yo Si te Creo Cuba y Alas Tensas, refieren que la mayoría de los asesinatos a mujeres, han ocurrido en espacios públicos, mientras que otros se ubican en las inmediaciones de sus hogares o, incluso, dentro de sus viviendas.

De las 18 mujeres reportadas hasta ahora, 14 de ellas perdieron la vida en manos de hombres que conocían, siendo la inmensa mayoría de ellas exparejas o parejas de sus agresores.

En lo que va de año, del total de féminas muertas, 14 fallecieron debido al uso de armas blancas y, al analizar las lesiones ocasionadas, se deduce que el interés principal de su agresor era, efectivamente, quitarles la vida.

La información recopilada por las ONG corrobora que, al menos el 44 por ciento de las víctimas, dejan tras de sí hijos pequeños.

Tanto Alas Tensas como Yo sí te Creo Cuba, han hecho tres llamados de alerta al Gobierno cubano para que declare un Estado de Emergencia y apruebe una ley que ampare a las víctimas y condene más duramente a sus asesinos.

Hasta la fecha ninguna acción ha sido tomada por parte de las autoridades, dejando así desprotegidas a las mujeres cubanas.