ESTADOS UNIDOS
Flotilla sale de Miami con dirección a aguas internacionales cercanas a Cuba
Los tripulantes mostrarán su apoyo a las protestas contra el castrismo
Una flotilla de barco salió de Miami rumbo a aguas internacionales con el objetivo de posicionarse a 15 millas del territorio marítimo de Cuba para mostrar su apoyo a los manifestantes del 11J.
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Imágenes difundidas en redes sociales muestran varios barcos que llegarán hasta Cayo Hueso, donde se abastecerán de combustible y serán inspeccionados por elementos de la Guardia Costera de Estados Unidos.
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Esta agencia autorizó que un número determinado de barcos pueda hacer el viaje, pero con limitaciones para no violar normativas internacionales, ni leyes estadounidenses. Una embarcación de la Guardia Costera acompañará al grupo en todo momento.
Los tripulantes deberán apagar sus motores a 15 millas de las aguas cubanas y no pueden subir a los barcos a personas que traten de nadar hacia ellos o balseros que encuentren en el trayecto. En las embarcaciones tampoco puede haber armas.
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Es probable que más barcos se sumen a esta movilización, que se anunció tras el estallido social en la Isla que generó protestas masivas en más de 50 puntos, el pasado 11 de julio.
“No vamos a tocar tierra ni aguas de Cuba”, comentó a los medios el cubano Odany Veloz, uno de los organizadores, quien señaló que la movilización representa un acto solidario hacia el pueblo cubano que salió pacíficamente a las calles y recibió una brutal represión por parte del régimen.
La semana pasada, un grupo de cubanos trató de zarpar para posicionarse en aguas internacionales con víveres y la esperanza de poder desembarcar si ocurría un cambio en la Isla, pero las condiciones climáticas no permitieron la salida.
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La Guardia Costera emitió un comunicado para reiterar que existe una multa de hasta 25 mil dólares y 10 años de prisión para tripulantes de embarcaciones que entren a aguas territoriales de Cuba sin permiso.
Además se recordó que quienes traigan de manera ilegal ciudadanos extranjeros a EEUU serán acreedores a multas de hasta 250 mil dólares y cinco años de prisión.