DEPORTES
Gimnasta olímpica cubana Marcia Videaux Jiménez emigra a EEUU
Actualmente, como 24 años y habiendo participado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Videaux Jiménez era una de las máximas representantes del deporte cubano
Actualmente, la nacida en Manzanillo tiene 24 años. (Foto: MarciaVido21 – Instagram)
La destacada gimnasta olímpica cubana, Marcia Videaux Jiménez, conocida por ser una de las estrellas de la gimnasia femenina en Cuba, se encuentra en Miami tras decidir emigrar definitivamente de la Isla para emprender una nueva vida en Estados Unidos.
De acuerdo con un artículo de la revista Cubalite, la atleta nacida en Manzanillo escogió la ciudad de Miami, pues allí, en el sur de la Florida, viven su hermano Luis Alberto y otros familiares.
Actualmente, como 24 años y habiendo participado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Videaux Jiménez era una de las máximas representantes del deporte cubano. Hasta el momento se desconoce si los planes futuros de la deportista están relacionados con la gimnasia a la cual ha dedicado la mayor parte de su vida y que le ha proporcionado innumerables éxitos.
Ver esta publicación en Instagram
La atleta, quien ajustó su perfil de Facebook para reflejar su nueva residencia en Miami, se ubicó en el puesto 16 entre las mejores gimnastas en la prueba de salto durante la cita estival en la capital nipona. El logro fue catalogado como muy satisfactorio, sobre todo por las declaraciones posteriores de su entrenador Osniel Blanco, quien enumeró las dificultades enfrentadas por Videaux durante los entrenamientos previos.
El primer encuentro internacional de Videaux fue en la Copa del Mundo de Anadia (Portugal) en mayo de 2015. Allí ganó una medalla de oro en bóveda y una medalla de bronce en barras asimétricas. Ese mismo año fue campeona del caballo de salto en los Panamericanos de Toronto 2015. En julio compitió en los Juegos Panamericanos, terminando noveno en la general y ganando una medalla de oro en salto.
En una entrevista que abordó sus inicios en la disciplina deportiva, la granmense contó que “un día, mientras caminaba con mis padres, pasé por un gimnasio. Vi a unas chicas entrenando y me paré en la puerta para mirar. Luego comencé a hacer lo mismo por mi cuenta, en la cama, hasta que mis padres me llevaron a entrenar”.
