MUNDO
ISIS se atribuye el atentado terrorista en Sri Lanka
Las autoridades no descartan la participación de otras agrupaciones terroristas
Hoy martes, el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, siglas en inglés) asumió la responsabilidad de las explosiones ocurridas entre tres iglesias cristianas y mismo número de hoteles de lujo en Sri Lanka, que provocaron, hasta el momento, la muerte de 310 personas y 500 heridos.
Antes de que ISIS se atribuyera el atentando, el gobierno del país asiático acusó a un pequeño grupo radical islamista pero no se descartó la idea de que recibió ayuda de una o varias organizaciones terroristas que operan fuera de Sri Lanka.
La agencia de propaganda del Estado Islámico, Amaq, difundió un comunicado en el que se confirmaron los ataques suicidas a dichos lugares.
“Los perpetradores del ataque que apuntó contra ciudadanos de los gobiernos de la coalición y cristianos en Sri Lanka anteayer eran luchadores del ISIS», dice el comunicado.
El escrito también se menciona que en los ataques murieron extranjeros originarios de países que emprendieron la campaña militar que desapareció el intento de “califato” del ISIS en Siria e Irak.
Entre los numerosos turistas que fallecieron se encuentran seis británicos, cuatro estadounidenses, dos españoles y dos australianos.
Cabe mencionar que ISIS ha perdido fuerza en su proyecto de imponer un estado islámico de orientación salafista al perder el mes pasados su último reducto que se encontraba tanto en Siria como Irak.
Sin embargo, no ha disminuido su capacidad de acción como grupo terrorista en Medio Oriente y con la posibilidad de influir en agrupaciones extremistas locales.
Las autoridades de Sri Lanka manifestaron que el ataque a las sedes cristianas pudo ser un acto de venganza por la masacre ocurrida en marzo en la ciudad de neozelandesa de Christchurch, donde un supremacista blanco ejecutó a 50 musulmanes en dos mezquitas.
Ayer, se reportó que estaban siendo distribuidas imágenes de tres presuntos atacantes suicidas en Sri Lanka, quienes fueron identificados como Abu Ubaida, Abulbarra y Abul Muktar.
Las investigaciones también están dirigidas hacia el empresario Insan Seelvan y al grupo local National Thowheeth Jama’ath (NTJ), que hasta antes del ataque solo realizaba actividades relacionadas con el vandalismo.
El gobierno de Sri Lanka no descarta la posibilidad que NTJ haya recibido apoyo del grupo terrorista Jamaat-ul-Mujahideen, radicado en la India y en Bangladesh.
Por la debilidad que tiene ISIS, cabe la posibilidad de que el Estado Islámico se esté atribuyendo los atentados con fines propagandísticos, aunque estos ocurrieron con la metodología que sus simpatizantes aplican al momento de ejercer un ataque terrorista.
Con Información de Infobae