Inmigrante guatemalteca demanda al gobierno de EEUU tras morir su hija en centro de detención

Una demanda por un valor de 60 millones de dólares es la que presentó la guatemalteca Yazmín Juárez contra el gobierno de EEUU, ante el fallecimiento de su hija por la mala atención médica que recibió en un centro de detención de inmigrantes, ubicado en Texas.

La madre y su hija Mariee, quien tenía menos de dos años, estuvieron retenidas en el Centro Residencial Familiar del Sur, donde fueron trasladadas por agentes de inmigración cuando entraron a EEUU de manera ilegal cruzando el Río Grande.

En dicho centro la niña enfermó y la madre, al pedir la atención médica, solo le recetaron medicamentos que no mejoraron el estado de salud de la pequeña y ella empeoró con el paso de los días.

El abogado de Yazmín Juárez, R. Stanton Jones, asegura que el centro decidió liberar a la madre e hija cuando la niña ya presentaba un cuadro muy grave en su salud. Tras salir, Jazmín de inmediato buscó atención médica y durante seis semanas su hija estuvo internada en el Hospital de Niños de Filadelfia, donde falleció el 10 de mayo a causa de una insuficiencia respiratoria.

En un comunicado el abogado asegura que el gobierno de los Estados Unidos tenía el deber de proporcionar a Mariee condiciones de vida seguras y sanitarias, además de la necesaria atención médica para evitar consecuencias trágicas.

“Mariee ingresó a Dilley siendo una niña saludable y 20 días después fue dada de alta una niña gravemente enferma con una infección respiratoria potencialmente mortal. Mariee murió pocos meses antes de su segundo cumpleaños porque ICE y otras personas acusadas de su atención médica descuidaron proporcionar el estándar más básico de atención ya que su condición se deterioró rápidamente y su madre Yazmin pidió ayuda”, señala en otra parte del comunicado.

Como parte de su demanda, la madre ya hizo reclamaciones a varias agencias gubernamentales, en especial contra el Departamento de Seguridad Nacional, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Pero, en respuesta, algunos funcionarios han defendido la atención médica en las instalaciones.

Por ejemplo, Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) hizo público un comunicado en donde se señala lo siguiente:

“Nuestros profesionales capacitados en el cumplimiento de la ley se adhieren a la misión del departamento, respetan nuestras leyes y continúan brindando seguridad y protección a nuestra nación”.

Además, una portavoz de la Oficina de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos, Jennifer Elzea, ha defendido la atención médica en el establecimiento y señala que en ICE existe el compromiso de garantizar el bienestar, así como la atención médica necesaria y apropiada, a todas las personas bajo custodia.

Añadió que en los centros de detención de inmigrantes el personal incluye enfermeras y proveedores de salud mental con licencia, atención a nivel medio que incluyen un asistente médico y una enfermera practicante, así como servicio dental  y de emergencia las 24 horas.

Con Información de CiberCuba