Médicos rusos en el Líbano buscan salvar miles de vidas afectadas por la explosión

El presidente del Líbano ha alertado que los daños materiales causados por la poderosa explosión que sacudió la capital el pasado 4 de agosto superan los 15.000 millones de dólares, mientras unos 4.000 edificios quedaron afectados, gran parte de ellos destruidos por completo.

Uno de los primeros países en reaccionar ante la crisis desatada en esa nación árabe ha sido Rusia, que no dudó en enviar médicos y servicios de rescate a la zona afectada.

Un equipo de RT tuvo la oportunidad de acceder al quirófano de un hospital de la ciudad de Baabda, en el que reconocidos doctores rusos estuvieron trabajando junto a sus compañeros libaneses para salvar la vida de una de las casi 6.000 personas afectadas por la detonación.

La paciente tiene numerosas fracturas en la cabeza, entre otras heridas, que complicaron la operación. Si los médicos no hubiesen llegado a tiempo, el impacto de la explosión podría haber dejado ciega a la mujer. En cambio, ahora tiene mucha esperanza.

«Durante cinco días hemos trabajado en el Líbano, en clínicas, tanto públicas como privadas, ya que todas las víctimas fueron hospitalizadas en todas las clínicas de la ciudad de Beirut. Durante este tiempo, atendimos a más de 200 pacientes y participamos en consultas y en la determinación de la estrategia de tratamiento de más de 25 pacientes graves», explicó el reputado cirujano Valeri Mítish, director del Instituto de Cirugía Pediátrica de Emergencia, jefe del Departamento de Traumatología, Heridas e Infecciones de Heridas.