México cae ante Japón, pero el cubano Randy Arozarena es el mejor jardinero del Clásico Mundial

Desde su perfil oficial en Facebook, Arozarena agradeció a todos por “esta gran aventura” y prometió mejores actuaciones en el futuro. (Foto: Periódico Cubano)

El equipo de México cayó en un cerrado partido ante Japón durante la segunda semifinal del Clásico Mundial de Béisbol, donde el cubano Randy Arozarena se reafirmó como el mejor jardinero izquierdo de la competencia, al realizar sendas atrapadas, incluido el robo de un jonrón tras un espectacular salto sobre la cerca del estadio LoanDepot Park en Miami.

Durante todo el encuentro, que arrancó ganando México, el cubano fue la bujía inspiradora del equipo. En el quinto episodio, el nacionalizado mexicano dejó boquiabiertos a todos al atrapar el batazo de Kazuma Okamoto dando un salto espectacular, luego de una metódica medición de la bola, para con absoluta serenidad capturar la esférica que estaba del otro lado.

“Randy es increíble. Un talento extraordinario, con una personalidad contagiosa. Creo que todos estarán de acuerdo de que es alguien fenomenal para el béisbol, fenomenal para Cuba y fenomenal para México”, comentó su mánager Benjamín Gil.

Tras la magnífica actuación del equipo mexicano, el director, con experiencia en Grandes Ligas siendo coach de banca del equipo de los Angelinos, dijo que “en México habrá un cambio radical. No sé si mañana o dentro de una semana, un mes o un año. Pero el béisbol va a empezar a crecer, si no el deporte más importante”.

“Estas dos semanas van a atraer a muchos jugadores jovencitos tanto en México como mexicanos en el extranjero. Por ese motivo siento que fue una victoria, a pesar de que no se ganó hoy”, añadió.

Desde su perfil oficial en Facebook, Arozarena agradeció a todos por “esta gran aventura” y prometió mejores actuaciones en el futuro. “Mi sueño no se acaba acá, esto recién comienza y volveremos más fuertes. Gracias México por tanto cariño a mí y a mis compañeros. Gracias familia y amistades que vinieron a apoyarme y a los que no pudieron y lo hicieron de algún lugar en este mundo, gracias también”.

“Nos vamos con la frente en alto como lo dije antes, dejaríamos todo en el terreno y nos ganó un tremendo equipo. Bendiciones a todos”, insistió el nacido en Arroyo de Mantua, Pinar del Río.

Japón vino de atrás en par de ocasiones y, con la parsimonia asiática que los caracteriza, esperaron el momento justo para atacar. En la parte baja de la novena, perdían por una carrera y el fenómeno Shohei Ohtani encendió la mecha al abrir con tubey al primer lanzamiento.

Luego, el cuarto bate negoció base por bolas, ya que había dado un jonrón de tres carreras para empatar el juego a tres y el relevista Gionani Gallegos se cuidó en demasía.

Entonces, con dos en base, le tocó el turno a Munetaka Murakami, quien se había ponchado en tres ocasiones. A la hora buena, dio un descomunal batazo que picó en lo profundo del jardín central y sus compañeros corrieron como bólidos para anotar las dos carreras y dejar al campo a los mexicanos, seis carreras por cinco.

En opinión del periodista cubano Francys Romero, “México fue una de las mejores historias de este V Clásico Mundial. Pierden en la última línea, como debe perderse siempre. Esa manera de perder, aunque es la más dolorosa, es también la más honorable”.

Nunca en la historia un equipo de un deporte colectivo de México había alcanzado la etapa de semifinal de un mundial.

Ahora Japón se medirá ante EEUU en la final del V Clásico Mundial este martes 21 de marzo a las 7:00 p.m. en la ciudad de Miami.