Nuevas olas de violencia podrían acabar con el turismo en México

«Estábamos en la recepción cuando una familia llegó con los recepcionistas para decirles que querían cancelar todo e irse del resort. Los cinco niños habían presenciado el ataque. Algunos aún no terminaban de vomitar del susto. Nadie del personal entendió al principio lo que estaban diciendo», relató una turista británica, respecto a los hechos ocurridos el pasado 3 de junio en las playa que colinda con el Hotel Gran Bahía Príncipe en Tulum, México – uno de los sitios más turísticos de la Riviera Maya -, cuando se registró un tiroteo en el que resultó herido un salvavidas.

Pero este no es hecho aislado y mucho menos poco común en México, donde la actual crisis de violencia provocada por la actividad del narcotráfico. Tan solo en el primer bimestre de 2019, se registraron alrededor de 6 mil asesinatos en todo el país, en lo que sería su inicio de año, más sangriento de su historia.

En Quintana Roo, la cifra de homicidios dolosos se duplicó, pasando de los 359 casos ocurridos en 2017 a los 763 siniestros en 2018, lo que sería un aumento del 112%, según reportó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).

De acuerdo al Semáforo Delictivo Nacional, Quintana Roo es uno de cinco estados, donde en 2019 se han incrementado de manera alarmante el número de homicidios al año, así como otros delitos graves . El fiscal general del Estado, Óscar Montes de Oca, aseguró que durante los primeros meses del año, se registraron alrededor de 60 asesinatos por mes.

Esta ola de violencia ha afectado fuertemente a la industria turística, desde la administración del ahora ex – presidente, Enrique Peña Nieto, lo que ha dejado consecuencias como una disminución del 2% en el número de visitantes extranjeros que arribaron a Cancún, el destino turístico más importante del país, siendo esta, la primera vez en 7 años que su tasa de visitantes ha disminuido.

«Hay una desaceleración que se ha manifestado desde el primer trimestre del año 2018», afirmó Miguel Torruco Márquez, secretario de Turismo.

De acuerdo con la Organización Mundial de Turismo, Turquía ha superado a México en el ranking de los países que más turistas reciben a nivel mundial, cuando la nación americana pasó del sexto al séptimo lugar en el listado.

El principal ejemplo de los efectos de la violencia en la actividad turística, es el caso de Acapulco, que por muchos años fue el principal destino vacacional del país, hasta que su propia ola de violencia destruyera la industria.

Con 110 asesinatos por cada 100.000 habitantes, es la segunda ciudad más violenta del mundo, según la clasificación de 2019 del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública.

En el periodo entre 2012 y 2017, Acapulco perdió el 63% del turismo extranjero.

Esta tendencia se ha mantenido en otros sitios turísticos como Huatulco, Mérida, Tapachula y Villahermosa, tal y como señalan los reportes de Aeropuertos del Sureste (Asur).

Incluso, Playa del Carmen, localidad famosa por ser un foco de turismo nacional e internacional, ha alcanzado el 13° lugar de los municipios más violentos, con 99 asesinatos ocurridos entre octubre de 2018 y marzo de 2019.

Estos altos niveles de violencia, son causados por la actividad del narcotráfico y el crimen organizado en el país, el cual ha alcanzado espacios que muchos creyeron intocables, como las playas vírgenes, los hoteles de lujo, campos de golf, entre otros.

El 90% de los homicidios registrados en estas regiones, son “ajustes de cuentas” del narco, cuyas actividades van desde el tráfico de armas y drogas, hasta el secuestro, el cobro de piso e incluso el tráfico de personas.

En una entrevista hecha al ex- secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, mostró su decepción por la percepción de inseguridad y como esta ha afectado al turismo, ya que asegura que la situación de crimen del país es “muy diferente” a lo sucedido en los hoteles de lujo al que llegan los visitantes, sin embargo, sucesos como el del pasado lunes, parecen señalar lo contrario.

Con información de Infobae