Rusia anuncia el envío de petróleo y otros productos de forma regular a Cuba

Tras las sanciones de Occidente, el petróleo ruso se vende principalmente a China e India, que en ocasiones utilizan criptomonedas para el pago. (Foto: Periódico Cubano)

El gobierno de Rusia anunció que enviará de forma regular petróleo y otros productos a Cuba, su aliado en el Caribe, justo cuando los niveles de crisis económica, energética y de alimentos en la Isla están llevando al pueblo a protestas diarias.

De acuerdo con el viceprimer ministro ruso, Dmitri Chernyshenko, la forma de concretar envíos de petróleo, fertilizantes y trigo, así como otros suministros fue discutida en horas recientes por equipos de gobierno de ambos países en el marco de la Comisión Intergubernamental Ruso-Cubana encabezada por el viceprimer ministro cubano Ricardo Cabrisas.

Rusia también tiene sus razones para ayudar a Cuba, pues en la actualidad se viven momentos de máxima tensión con Estados Unidos por la invasión de Vladímir Putin a Ucrania y la posterior anexión a Rusia del 15% del territorio ucraniano.

Incluso el mandatario estadounidense, Joe Biden, llegó a decir en días recientes que el mundo vive un periodo de amenaza nuclear tan preocupante como en octubre de 1962, durante la Crisis de los Misiles.

Ante este escenario es geopolíticamente lógico que Putin quiera tener carta abierta en Cuba para colocar militares y armamento en Cuba, a solo 90 millas del territorio estadounidense. Una vez más, los dirigentes comunistas de la Mayor de las Antillas “venderían” la tierra cubana para operaciones de este tipo a cambio de petróleo y comida que le permita acallar las protestas ciudadanas y seguir conservando el poder que ostentan desde hace más de 63 años.

El regreso del turismo ruso es una muestra de la decisión de ayudar al régimen cubano

El espacio aéreo europeo sigue cerrado para los aviones rusos, una causa de que desde febrero del presente año se hayan detenido los viajes turísticos desde Moscú a La Habana, Varadero y la cayería norte de la región central de Cuba. Sin embargo, las aerolíneas y turoperadores rusos se arriesgaron y comenzaron a tomar una ruta más larga con tal de llegar a Cuba.

Para burlar el cierre del espacio aéreo, los aviones salen de Moscú con dirección norte para bordear el Mar de Barents y el Mar de Noruega, posteriormente bordean los países nórdicos y salen a la izquierda de Gran Bretaña. Luego sobrevuelan el océano Atlántico para llegar a Cuba. Ese inmenso desvío implica casi 14 horas de vuelos, unas cuatro horas más que el recorrido habitual si no estuvieran cerradas las fronteras europeas para las aerolíneas rusas.