Se acerca una nueva revolución en los smartphones tras 25 años en el mercado

Era el año de 1993 cuando en la Wireless World Conference que se realizó en Florida, la compañía IBM presentó al mercado a Simon. Este teléfono inteligente permitía recibir y enviar correos electrónicos, de igual manera podía conectarse a las computadoras, contenía un calendario, agenda, una serie de aplicaciones y era el primer teléfono con un teclado, de cierta manera predictivo, y contaba con un lápiz para poder utilizarlo en su pantalla LCD.

La compañía de telecomunicaciones BellSouth Celular se encargó de su distribución en 1994. El precio de Simon era de $899 dólares bajo un contrato de 2 años o de $1,099 dólares en su versión libre. Debido a sus altos precios y a la escasa duración de su batería hundieron la iniciativa de IBM de introducir al mercado un teléfono con capacidad múltiple.

A pesar de la mala recepción al principio, las compañías de telefonía digital no bajaron los brazos para seguir innovando y presentar al mercado productos que vayan acorde de las necesidades de sus clientes.

Han pasado 25 años desde la presentación de Simon y los siguientes pasos en la evolución de la telefonía digital son: el Internet de las Cosas, el 5G y la inteligencia artificial.

Con el Internet de las Cosas, el teléfono móvil se convertirá en el centro de mando de muchos aparatos electrónicos como refrigeradores, aires acondicionados, lavadoras y demás. El 5G ampliará su capacidad de operatividad y la inteligencia artificial servirá para anticipar la satisfacción y necesidades, guardando los gustos y preferencias de los usuarios.

Los clientes buscan un paso más en la resolución de sus pantallas

Desde la presentación de Simon en 1994, vino la presentación del iPhone en 2007 en donde la compañía creada por Steve Jobs lanzó al mercado el primer celular en donde la pantalla era el centro de la tecnología. La pantalla alcanzaba a cubrir casi la totalidad de la careta del producto, englobando el teclado dentro de la misma.

Al día de hoy, el vicepresidente del grupo Audiovisual de Samsung Electronics, Joshua Cho, comenta que la presentación del iPhone despertó en los clientes una necesidad mayor en cuanto a sus pantallas. El vicepresidente Cho afirma que los clientes ahora buscan “más resolución, más tamaño, más alcance, más usabilidad, nuevos diseños y menos consumo de batería».

Joshua Cho comenta que los teléfonos móviles han alcanzado tamaños en los que se han tenido que vender anillos plegables a la parte trasera para que puedan ser maniobrados.

De igual manera, el vicepresidente del grupo de investigación de Samsung, Byung Duk Yang, finaliza que el siguiente paso será la pantalla plegable que “permitirá disponer de más superficie de visión de determinadas aplicaciones sin aumentar el tamaño del teléfono».

Con información de El País