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Periódico Cubano

Violaciones, asalto y muerte: Cubanos describen el infierno de cruzar la selva del Darién

MUNDO

Violaciones, asalto y muerte: Cubanos describen el infierno de cruzar la selva del Darién

El paso es considerado la ruta migratoria más peligrosa del mundo

Migrantes en la Selva del Darién

Migrantes cubanos enfrentan la pandemia del coronavirus atrapados en la Selva del Darién (Imagen de referencia: Yolvis de la Cruz Facebook).

Los casi 700 migrantes cubanos que quedaron varados en Necoclí, Colombia, en su intento de llegar a Estados Unidos, han tenido que atravesar la selva del Darién, enfrentando todos los peligros que esto significa, para poder llegar a Panamá.

En un reportaje elaborado por Diario de Cuba, algunos de ellos relatan la pesadilla que ha sido cruzar por la llamada “Ruta de la Muerte” entre ambos países.

Una cubana víctima de abuso sexual relató al medio cómo había sido asaltada junto con una compañera por un grupo de indígenas, solo a unos metros del poblado de Bajo Chiquito, el primer contacto con Panamá.

“De un platanal salieron seis indígenas armados con machetes, nos taparon la boca y a la fuerza nos llevaron adentro de las matas. Nos quitaron los pasaportes y nos arrancaron la ropa mientras nos decían ‘si gritan, les cortamos la garganta’. Ellos sabían que nuestros amigos iban adelante”, relató la migrante, que pidió permanecer en el anonimato.

“Mi mente quedó en blanco desde el primer momento. Solo recuerdo sus carcajadas mientras nos violaban”, añadió.

La mujer expresó que lo peor para ella fue lidiar después con la indiferencia de las autoridades panameñas, pues aunque denunció lo que había ocurrido, no se atendió su denuncia ni se les proporcionaron siquiera los servicios básicos para víctimas de violación, como sería la atención médica.

“No hacen nada. Son una banda de indígenas que roban a todo el que pasa pasaporte, teléfono y hasta comida. No hemos recibido ayuda psicológica ni médica especializada”, lamentó.

Durante su paso por la selva, los migrantes enfrentaron todos los peligros que les habían sido advertidos por los coyotes que los llevaron hasta la entrada del paso, incluyendo el asalto y despojo de sus pocas pertenencias.

Los relatos sobre robos, asesinatos y violaciones son algo común entre quienes logran sobrevivir al camino a través de la selva. Varios han dado testimonios de encontrar los cuerpos de migrantes menos afortunados en el camino, a lo que se suman los riesgos de la naturaleza.

Para los migrantes provenientes de Colombia, a los robos y las violaciones se añadió la muerte de una emigrante haitiana, probablemente debido a la deshidratación y la desnutrición, otra de las amenazas para quienes cruzan por la selva sudamericana.

“Ella cayó al suelo de repente, tratamos de auxiliarla, pero fue en vano. El esposo está acá, en el albergue. Se le ve aislado de todos, cargando a su niña”, relató un cubano.

El hombre describió la situación en el albergue de San Vicente como “un régimen carcelario”.

“Nos dan solo una hora de carga eléctrica para los celulares. La orden es dormir a las 9:00 pm. Por eso se formó un motín. Unos haitianos no querían entrar al albergue, es que el calor es insoportable. Los ánimos se caldearon, la guardia tiró gas pimienta y afectó a una bebé”, dijo el cubano, que también pidió mantenerse en el anonimato por miedo a represalias.

Para este domingo había 347 emigrantes en el albergue, entre ellos alrededor de 100 cubanos.

“La comida es buena, pero poca”, añadió el emigrante.

Los cubanos y el resto de los emigrantes llegaron a territorio panameño guiados por coyotes desde Capurganá, Colombia, por el temido camino entre la selva del Darién, considerada la ruta migratoria más peligrosa del mundo, de acuerdo con un reportaje de la BBC, pero un paso obligado para quienes quieren llegar a EEUU desde Sudamérica.

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