Aceite en Cuba: desaparecido de las tiendas y hasta en 300 pesos en el mercado negro

La escasez de alimentos que ha caracterizado a Cuba por años y que se ha recrudecido especialmente desde el 2019, mantiene desaparecidos de tiendas y mercados varios productos básicos, como es el aceite de cocina.

Este producto, que ya era uno de los más escasos junto a la harina y el frijol, tras el ordenamiento monetario se volvió incluso más difícil de encontrar, al grado de no hallarse ni en el mercado negro.

De acuerdo con un reportaje de Diario de Cuba, los ciudadanos luchan por encontrar el indispensable producto, pero con la escasez llega también un encarecimiento que lo ha vuelto por completo inaccesible, a pesar de ser uno de los artículos más básicos del hogar.

Adquirir productos en el mercado negro fue mucho tiempo la opción para las familias cubanas, primero por el desabastecimiento de tiendas y mercados estatales, y luego porque varios artículos se proveen solo a las tiendas en moneda libremente convertible (MLC), es decir, en dólares.

Sin embargo, en el mercado negro los dólares valen al menos el doble de su valor, unos 50 pesos cubanos, aunque en ocasiones llega a alcanzar los 100.

Así, según fuentes entrevistadas por este medio, un solo litro de aceite de soya puede costar hasta 300 pesos en el mercado negro, hasta 14 veces más que en cualquier otro país del continente.

“La razón es la falta de oferta en las tiendas, no hay ni en pesos cubanos ni en Moneda Libremente Convertible (MLC)”, dijo al citado medio José Antonio, un cuentapropista grabador del Paquete Semanal, radicado en Mayarí, Holguín.

“Aquí hace meses que no venden aceite. El ‘salve’ eran los comerciantes que lo cargan desde Santiago de Cuba, pero con el cierre por el Covid-19, se acabó, y el poquito que aparece y que la gente lucha está a 300. No hay quien pueda”, añadió.

Aún en el mercado formal, en tiendas estatales el precio del aceite es equivalente a dos dólares al cambio oficial, alrededor de 50 pesos, ya el doble del resto de los países de América aunque el salario de Cuba es entre tres y cuatro veces inferior.

“Llevo una semana comiendo sin grasa, desde que se me acabó el aceite de la cuota”, comentó al mimo medio Raúl, un obrero de la construcción.

“Y eso porque me quedaba para empezar el mes un poco de un litro que compré en 150 pesos en la calle. Pero ahora está a 300 pesos y no aparece ni en el mercado negro”.

“Cuando no hay aceite uno no halla cómo cocinar, así no se puede. La comida sabe como si estuviera hervida. He ido a varios puntos y cuando llego ya se acabó. Esto es terrible. Cada vez el salario rinde menos”, concluyó.

La ausencia de productos básicos ha sido denunciada por los cubanos especialmente desde hace casi dos años, cuando el designado presidente Miguel Díaz-Canel presentó la situación de escasez extrema como “temporal”.

Desde ese entonces, incluso si llegaba a haber aceite en las tiendas, quienes quisieran adquirirlo debían formarse en enormes colas de hasta 12 horas, las cuales no cesaron ni con la pandemia de COVID-19.

El gobierno de Cuba sigue culpando de esta situación al bloqueo de EEUU, a pesar de que el mismo no incluye ningún tipo de insumos comestibles.