Activista bajo arresto domiciliario por grabar momentos posteriores a la explosión del hotel Saratoga

El gobierno cubano ha detenido al menos a una persona por grabar los momentos posteriores a la explosión del hotel Saratoga. (Foto: Periódico Cubano)

El activista Ángel Cuza fue liberado este martes luego de ser detenido por transmitir en una directa vía Facebook los primeros momentos posteriores a la explosión del hotel Saratoga, en La Habana.

El opositor declaró ante Radio Televisión Martí que el gobierno cubano lo soltó con la medida cautelar de prisión domiciliaria indefinida y, además, ahora enfrenta cargos por “sedición”.

“No puedo salir de la casa a no ser que vaya a ver a mi hija, o que vaya al médico, o que vaya a un hospital. Si voy a cambiar de domicilio, tengo que informarlo; no me dijeron por qué tiempo ni nada, aunque pregunté, pero tampoco me quisieron decir”, comentó el activista.

Cuza mencionó que mientras estuvo privado de su libertad en Villa Marista, un centro de instrucción penal de la Seguridad del Estado, nunca le aclararon que estaba en esa situación por dicha directa, compartida más de 12 mil veces.

“Nunca me hicieron referencia al video de hotel Saratoga; supuestamente, dicen que fue una anterior directa que yo hice, pero, antes de ese día, yo no hice ninguna directa. La del hotel Saratoga fue la única que yo hice”, manifestó.

En el perfil en Facebook de Cuza se puede ver cómo captó todo su camino hacia la zona de la explosión y las primeras acciones de rescate entre ciudadanos y policías presentes.

Al desconocer que el siniestro fue a causa de fuga de gas mientras era abastecido el edificio, el opositor consideró el hecho como un derrumbe, denunciando que las autoridades construyen nuevos hoteles sin dar mantenimiento a las antiguas edificaciones.

En una segunda transmisión en vivo, Cuza avisó que estaba refugiado en la casa del joven opositor Pedro Quiala, cuando agentes de la policía política comenzaron a perseguirlo por reportar la tragedia en redes sociales.

Según el último informe del Ministerio de Salud Pública (Minsap), la explosión causó la muerte de 42 personas, una cifra que podría incrementar en las siguientes horas debido a que todavía continúan las labores de las fuerzas de salvamento en la zona de desastre.

Los fallecidos son 38 adultos y cuatro menores de edad que residían en La Habana, Holguín y una mujer en España. Respecto a los pacientes hospitalizados, seis se encuentran en estado crítico y dos graves.

La onda expansiva de la explosión causó daños de consideración en el templo bautista El Calvario, el Teatro Martí, la escuela primaria Concepción Arenal y edificios de viviendas en La Habana Vieja.