Adolescente en Hialeah es sospechoso del homicidio de su propia madre

Derek Rosa podría ser procesado como adulto en Hialeah. (Foto: Archivos del condado de Miami-Dade)

El pasado viernes 13 de octubre, la ciudad de Hialeah fue escenario de un espeluznante suceso. Según los reportes de la policía local, un adolescente de tan solo 13 años, identificado como Derek Rosa, cometió un acto de homicidio contra su propia madre.

El informe compartido a medios de comunicación señaló que el joven apuñaló a su progenitora mientras ella dormía en compañía de su otro hijo con dos semanas de nacido. Ese día, los servicios de emergencia recibieron una llamada luego de las 11:30 p.m. en la que Rosa confesó el horrendo crimen.

La víctima, identificada como Irina García, fue encontrada por los oficiales en su residencia con múltiples heridas de arma blanca en el cuello. Fue declarada muerta en la escena a causa de las lesiones ocasionadas con un cuchillo de cocina que tenía un mango de color morado.

El informe policial detalló que el corte en una arteria ocasionó el fallecimiento de la mujer. Adicionalmente, se descubrió que Derek había tomado dos armas de fuego que pertenecían a su padrastro, con la intención inicial de quitarse la vida.

Sin embargo, no logró llevar a cabo su plan y, en lugar de eso, envió fotos del crimen a un amigo a través de las redes sociales y confesó lo que había hecho en una llamada telefónica. Afortunadamente, la policía confirmó que el bebé no sufrió heridas y actualmente está bajo el cuidado de la abuela materna.

Eddie Rodríguez, vocero de la Policía de Hialeah, informó que el muchacho no ha proporcionado detalles sobre su motivación para el crimen. Cabe destacar que el adolescente no tenía un historial previo de problemas de salud mental ni de conducta problemática en casa o en la escuela.

El joven enfrenta ahora graves cargos de asesinato en segundo grado con un arma y ha sido trasladado a la cárcel juvenil, mientras los investigadores continúan buscando respuestas para comprender los motivos detrás de este trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad de Hialeah.

Si el adolescente es juzgado como adulto por dicho delito, según las leyes de Florida, podría enfrentar una condena de hasta 15 años de prisión y una multa de 10.000 dólares.