ESTADOS UNIDOS
Alan Gross asegura que Trump “arrojará a todos los cubanos debajo del autobús”
Alan Gross, contratista de USAID, estuvo cinco años preso en Cuba por presuntos cargos de espionaje
Alan Gross, el ciudadano estadounidense que estuvo cinco años preso en Cuba por cargos de espionaje, señaló que el actual presidente Donald Trump no es un aliado de la comunidad cubanoamericana y que “arrojará a todos los cubanos debajo del autobús en un santiamén”.
Donald Trump arrojará a todos los cubanos debajo del autobús en un santiamén.
— Alan P. Gross (@AlanPGross) September 14, 2020
Las declaraciones del excontratista de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), parten de la reciente polémica por el premio que veteranos de Bahía de Cochinos entregaron a Trump en 2016 y un artículo publicado en el diario The Atlantic, donde testigos anónimos aseguran que el mandatario tildó de “perdedores” y “fracasados” a los veteranos de guerra.
El presunto galardón entregado por la Brigada de Asalto 2506 fue desmentido por un periodista de la CNN, quien aseguró que solo fue un reconocimiento.
Por otra parte, el candidato republicano calificó el texto de The Atlantic como un burdo intento de desequilibrar su campaña.
El tuit de Gross, también aparece horas después de que la comunidad cubanoamericana de Florida organizara una gran flota de automóviles para expresar su respaldo a Donald Trump. El evento, bautizado como “La madre de todas las caravanas”, fue convocado por el grupo Cubans 4 Trump y tuvo como punto de concentración el Central Park del Doral.
Arresto de Alan Gross y posterior intercambio
Recomendado por el Comité Judío Americano (JDC), Alan Phillip Gross arribó a finales de marzo del 2009 a Cuba con el objetivo de ayudar a los miembros del templo Beth Shalom a tener acceso a Internet. En diciembre de ese mismo año, fue arrestado en el Aeropuerto Internacional “José Martí” de La Habana y trasladado a la prisión de Villa Marista por formar parte de una campaña de desestabilización para invalidar a la Revolución.
En enero de 2010, Ricardo Alarcón de Quesada, expresidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, indicó que Gross estaba “trabajando para los servicios de inteligencia” de EEUU. El juicio en su contra no se llevó a cabo hasta un año después, donde fue sentenciado a 15 años de prisión. La causa del trabajador social fue apelada ante la Suprema Corte de Cuba, que reafirmó la sentencia en agosto de 2011.
La entonces secretaria de Estado Hillary Clinton, la congresista Ileana Ros-Lehtinen y miembros de la comunidad judía mostraron su rechazo ante el encarcelamiento.
Gross fue finalmente liberado el 17 de diciembre de 2014, como parte de un intercambio de prisioneros entre Washington y La Habana. La administración de Barack Obama, por su parte, dejó en libertad a tres de los cinco espías cubanos que aún se encontraban detenidos en Estados Unidos. Para muchos, este fue un paso importante para el deshielo de las relaciones entre ambos países.
Miriam Morejon
22 septiembre, 2020 - 1:25 PM at 1:25 PM
Este tipo merecia cadena perpetua en Cuba