Autoridades de Guantánamo confirman un segundo caso de paludismo en Cuba

Las autoridades sanitarias tienen bajo vigilancia un caso de paludismo en la provincia. (Foto © Periódico Cubano)

Autoridades de Guantánamo confirmaron el segundo caso de paludismo en Cuba en lo que va del 2024, una situación que comienza a generar preocupación por tratarse de una enfermedad erradicada en la Isla desde hace décadas.

Según Leonel Heredia Carpintrú, subdirector del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, el paciente afectado ingresó al país el 22 de febrero desde Angola, y comenzó a manifestar síntomas el 10 de marzo. Actualmente, se encuentra bajo atención médica en el Hospital General Docente ‘Dr. Agostinho Neto’, con una evolución satisfactoria.

El epidemiólogo explicó que se trata de un caso “no endémico”, originado por la importación del parásito Plasmodium a través de un mosquito del género Anófeles. Aunque aseguró que no hay transmisión autóctona en el territorio, resaltó la importancia de intensificar las medidas de prevención; especialmente ante la proximidad de la época de lluvias y el aumento de la temperatura, condiciones que favorecen la proliferación del mosquito transmisor.

El funcionario destacó la escasez de recursos para las campañas antivectoriales, como combustible, insecticidas y equipos de fumigación. A pesar de estas limitaciones, se han realizado tratamientos adulticidas intra y extradomiciliarios en las áreas donde el paciente afectado estuvo presente antes de detectarse la enfermedad en él.

Este caso se suma a otro registrado en enero en Sancti Spíritus, donde también se identificó un paciente que llegó desde Angola. En esa ocasión, las autoridades llevaron a cabo acciones integrales, incluyendo la revisión de viviendas, fumigaciones masivas y mejoras en la higiene pública para prevenir la propagación del mosquito.

¿Cuáles son los síntomas del paludismo?

El paludismo puede presentar una variedad de síntomas que van desde leves hasta graves. Estos suelen aparecer entre 7 y 30 días después de la picadura de un mosquito infectado, aunque en algunas formas de la enfermedad pueden aparecer más tarde, incluso hasta varios meses después.

Entre los síntomas se encuentran fiebre, escalofríos, sudoración, dolor de cabeza, fatiga, náuseas y vómitos. En casos más graves, los pacientes también sufren coloración amarillenta de la piel, dolor abdominal, dificultades para respirar, convulsiones y hasta coma a causa de afectaciones al sistema nervioso central.

En algunas personas, especialmente en los niños y en aquellos que no tienen inmunidad adquirida, el paludismo puede progresar rápidamente y convertirse en una enfermedad grave, por lo que se debe buscar atención médica urgente si se presentan síntomas sospechosos, especialmente después de haber viajado a áreas donde esta enfermedad es endémica.