Bebé de ocho meses sobrevive a un severo síndrome mientras recibe atención en Sancti Spíritus

Un bebé de ocho meses, identificado con el nombre de Samuel Isaac Escalona García, sobrevive al síndrome Werdnig-Hoffmann mientras se encuentra internado en un hospital de la provincia de Sancti Spíritus.

El síndrome de Werdnig-Hoffmann o atrofia muscular espinal, es una enfermedad genética grave que afecta al sistema nervioso y a los músculos poco después del nacimiento. Este padecimiento es el tipo más severo de la atrofia muscular espinal que genera en los niños de seis años o menos una fuerte debilidad en todos sus músculos.

Los pronósticos de vida no son favorables para los pequeños que presentan este problema, la mayoría de los pacientes culminan con la muerte porque sufren dificultades o infecciones respiratorias.

El periódico oficialista Escambray informó que el pequeño se encuentra internado en el Hospital Pediátrico ‘José Martí Pérez’ de dicho territorio central de la Isla, donde fue ingresado a los seis meses de nacido cuando le diagnosticaron el síndrome.

Como parte del tratamiento, Samuel Isaac, oriundo del municipio de Cabaiguán, vive conectado a un respirador artificial y es alimentado por medio de una gastrostomía —una sonda colocada a través de la piel y la pared estomacal—.

La doctora Darelsy Balsaín Mencía, especialista de primer grado en Pediatría y directora del centro asistencial de la cabecera provincial, comentó que el niño primero presentó problemas respiratorios, también tenía complicaciones para ingerir alimentos y no movía ni un músculo.

“Se empezaron a hacer estudios genéticos y en el curso de ellos, ante la imposibilidad que tuvo para respirar, al no funcionarle los músculos respiratorios, fue necesario acoplarlo a un equipo de ventilación”, agregó la especialista.

Debido a sus condiciones de salud, Samuel requiere estar en un cuarto con condiciones especiales que garantice el acceso inmediato al personal del hospital ante cualquier emergencia médica, además de extremas medidas de higiene.

El bebé deberá permanecer ingresado en el referido centro de salud hasta que cumpla el primer año de vida y luego, si los padres así lo desean, podrán trasladarlo de regreso al hogar.

“Si la habitación en casa cumple con todos estos requisitos y el Programa de Atención Materno Infantil de la provincia lo certifica, entonces no tenemos impedimento para su traslado al hogar, pero Samuel deberá ser visitado constantemente por nuestros especialistas”, agregó otro doctor en el reportaje.

Las atenciones médicas han permitido que, por ahora, Samuel sea el segundo niño de dicha provincia que permanezca con vida ante el delicado diagnóstico que representa el síndrome de Werdnig-Hoffmann.

La espirituana Yésika Mora es la niña que más tiempo de vida ha sobrevivido a la enfermedad, gracias a una compleja atención en el territorio cubano.